Radiografía del seguro en España: así somos y así los contratamos
Seguros como jamás lo habríamos pensado. Las nuevas necesidades de los clientes –presentes y futuros– de las compañías aseguradoras, así como la búsqueda de la rentabilidad y la innovación de las mismas, han hecho evolucionar los productos aseguradores tal y como los conocíamos hasta hace unos pocos años.
Antaño, se hacía la contratación de un seguro a través de las diferentes oficinas que salpicaban el territorio español, ahora no hace falta más que una conexión a internet y una aplicación móvil para contratar un producto o hacer comparativas de precios entre compañías. Y no sólo eso, además, es posible usar la cobertura de los mismos –ya sea un seguro de viaje, salud, vida o automóvil– cuando realmente se necesite y pagar por ese servicio.
No hay que olvidar, además, que el sector asegurador es uno de los más potentes de nuestro país y uno de los que mayor rentabilidad encierra por ser una actividad fundamental en un sistema de Estado de Bienestar como el español. Hay que tener en cuenta, por ejemplo, que tener un seguro de vida es muy recomendable cuando se quiere financiar la compra, por ejemplo, de una vivienda.
Es más, analizado desde el punto de vista de la recaudación anual y según datos del Instituto para la Colaboración entre Entidades Aseguradoras (ICEA), el sector de los seguros supone algo más del 5% del PIB de la economía española, aunque se prevé que este 2019 la contribución sea aún más alta por la evolución al alza de los productos relacionados con vida y pensiones.
De hecho, según ICEA, los seguros que dan cobertura a situaciones de muerte o invalidez han crecido a cierre de 2018 hasta un 12% por la preocupación de los españoles por el ahorro, a pesar de estar ahorrando de cara a una eventual recesión. Según las últimas cifras del INE, la tasa de ahorro de las familias españolas se ha disparado a máximos de una década hasta el 19,3%.
La robustez del sector, además, está avalada por las cifras ya que, según ICEA, los ingresos de las aseguradoras por la venta de pólizas hasta septiembre de 2019 ascendían a 48.327 millones de euros, de los que casi 21.000 millones de euros corresponden al ramo de vida.
Seguros de vida por accidentes a medida
Entre los seguros de vida y un seguro de vida por accidentes hay una ligera diferencia. El primero cubre frente a imprevistos relacionados con la invalidez o el fallecimiento de una persona; mientras que el segundo, el de accidentes, cubre la muerte o la incapacidad siempre y cuando sea por un hecho accidental.
Planteada esta diferencia, que hace que los seguros de vida por accidentes sean algo más económicos, aunque se trata de un producto que no varía con la edad, el sexo o la salud del asegurado. Es por esta razón, así como por el precio de contratación, que los seguros de vida por accidentes se han convertido en una de las opciones preferentes entre un alto rango de edades.
De este modo, son capaces de captar clientes tradicionales y también a los conocidos millenials, los nacidos entre 1981 y 1999 con la tecnología en las manos. Sobre todo, además, teniendo en cuenta que según un estudio de ICEA y Fundación Mapfre, los seguros de vida –en general– y los de accidentes –en particular– no están entre las prioridades de este colectivo poblacional por su mentalidad cortoplacistas.
Seguros revolucionarios
Abanca Seguros, la división aseguradora de Abanca, por ejemplo, lanzaba a mitad de 2019 los seguros conocidos como ON-OFF. Una modalidad que ha revolucionado el mercado asegurador español en materia de innovación, inmediatez y control absoluto por parte de los clientes porque activan y desactivan la cobertura adaptándose a sus necesidades, incluso pudiéndose programar en un calendario los días el cliente que desea tener la cobertura. Es decir, el cliente paga únicamente por los días que consuma de su seguro durante el mes y se hace a través de la Tarifa Plana de Seguros –un producto exclusivo de Abanca que permite la agrupación de todos los seguros–.
Por el momento, Abanca Seguros sólo ha lanzado un seguro de vida por accidentes. Un producto que se contrata a través de la banca online de Abanca y que, además, ha sido pionero para clientes a partir de 18 años en adelante, especialmente para aquellos clientes con cargas familiares con especiales necesidades de protección, ya que ON-OFF tiene una cobertura de 50.000 euros en caso de fallecimiento e incapacidad.
Incluso El Corte Inglés se ha lanzado al sector asegurador y ha lanzado VidaMovida, el seguro de vida que, según detallan, paga por andar ya que premia con dinero a las personas que se preocupan por su bienestar. Este seguro, dirigido a personas entre 18 y 65 años que no sean fumadoras, incorpora un servicio de aplicación móvil que mide los pasos alcanzados a lo largo del día, lo que se traduce en una acumulación de dinero cada trimestre que se pueden canjear a través de una Tarjeta Regalo de El Corte Inglés.