La Navidad dispara un 30% la factura de la luz: Sigue estos cuatro consejos para ahorrar
Las luces del árbol y del nacimiento, las cenas familiares y las bajas temperaturas contribuyen a que se dispare la factura de la luz. Se calcula que durante las navidades el gasto se incrementa alrededor de un 30%. Existen pequeños gestos para cada rincón de nuestra casa que, si se usan correctamente, marcan una gran diferencia a final de mes.
Quizás 2018 sea un buen año para dar el paso y cambiar las bombillas del aguinaldo del árbol y el nacimiento por unas buenas bombillas LED. A priori puede parecer un gasto innecesario, pero a final de mes este pequeño gesto se tendrá una gran repercusión en la factura de la luz.
Muchas de las recetas navideñas se elaboran en el horno. Entre todos los electrodomésticos, son los hornos, los microondas y las vitrocerámicas los responsables de que disparar la factura de la luz. Existen algunos trucos como aprovechar el horno para cocinar más de un plato a la vez ó apagar la ‘vitro’ minutos antes de terminar la receta y emplear el calor residual para reducir notablemente el gasto de luz.
Tras las copiosas comidas y cenas, llega el momento de lavar los platos. Una de las primeras recomendaciones tanto de expertos como de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) es solicitar la discriminación horaria. Esta es una tarifa que establece dos franjas con precios diferenciados. La franja más barata empieza a las 10 de la noche y se alarga hasta las 12 de la mañana del día siguiente en invierno. En periodo estival se acorta hasta las 11 de la mañana. Siempre es una buena idea consultar esta tarifa para que el consumo resulte más económico.
Pese a las bajas temperaturas que este invierno acechan la geografía española, no es necesario tener la casa a la temperatura de una sauna. Se puede hacer, pero si el objetivo es ahorrarse unos euros a final de mes, tener la casa en una temperatura óptima, entorno a los 20 o 21 grados, es lo ideal para no tener sustos a final de mes.
Consumo en ‘Stand by’
Para reducir la factura de la luz debemos apagar los electrodomésticos que no estemos utilizando. Incluso, muchos consumidores desenchufan. En cualquier caso, no hay que olvidar que los aparatos que se quedan conectados en estado de reposo o “stand by” (por ejemplo, la televisión con la luz roja) consumen electricidad y provocan un incremento en la factura.