Liberbank pierde el 40% de su valor en Bolsa y el mercado no descarta otra intervención
La absorción del Popular por parte del Santander es la primera operación que se resuelve a través del Mecanismo Único de Resolución (MUR), propuesto por la Comisión Europea. Tras las fuertes caídas de la entidad, Bruselas decidió actuar, pero, ¿es posible que Liberbank acabe teniendo el mismo final? Si la situación no se revierte, BBVA y CaixaBank son los mejor posicionados para llevar a cabo la operación de rescate.
Una de las causas de la intervención del Popular fue que, tras pedir líneas de liquidez al Banco Central Europeo (BCE) conocidas como ELA, las agotó a los dos días por la retirada masiva de depósitos. La entidad se quedó sin activos que ofrecer como garantía y el banco central decidió estrenar el MUR con la ayuda del Santander. En esa misma situación se encuentra ahora Liberbank, que podría acabar absorbido por la misma vía.
«Lo que está pasando con Liberbank es un efecto contagio, los inversores están atacando a la banca un poco más débil. Lo que más preocupa al mercado son las retiradas de depósitos de las últimas semanas. Es un caso parecido, que no igual, pero sí puede haber cierto paralelismo con el Popular y eso al mercado no le gusta», explica Gustavo Martínez, de XTB.
Y es que en las últimas dos sesiones, Liberbank ha sufrido un desplome bursátil que ha alcanzado el 50% a media sesión de este viernes, aunque finalmente la caída ha sido cercana al 40% . El miércoles, la entidad tenía un valor en Bolsa superior a los 1.000 millones de euros, mientras que a cierre bursátil de la semana se sitúa en unos 600 millones.
«No está habiendo salida de depósitos. ¿Cómo sabe un analista que está habiendo esa fuga si no está en las oficinas? Ayer no sólo no salió dinero, sino que entró. Y hoy no ha salido. No hay ningún problema de liquidez», señalan fuentes de la entidad.
«Estas fuertes caídas tienen que remitir porque si no los inversores se van a asustar y es probable que nos encontremos con un problema serio. Si esto siguiera así, podría activarse de nuevo el mecanismo de intervención europeo y ser adquirido por otra entidad interesada» advierte Martínez.
No obstante, fuentes del banco aseguran que la entidad «tiene solvencia y capital suficiente» y que todos los activos están «perfectamente tasados» y actualizados a 2016. «El negocio tiene el problema que tiene toda la banca: la baja rentabilidad por los bajos tipos», concluyen.
El lunes, el cuarto mayor accionista de la entidad, la Corporación Masaveu, comunicó a la CNMV el aumento de su participación en el banco hasta el 5,6%. Este mismo viernes, el grupo quiso mostrar su confianza en la entidad y elevarla aún más, hasta el 5,7%, pero los títulos siguen en caída libre. El CEO de Liberbank, Manuel Menéndez, también compró este jueves 80.000 acciones de la entidad a precios entre 0,94 y 0,95 euros por título.
Desde Orey Financial consideran que que «la industria bancaria tiende a la concentración de entidades y Liberbank está dentro de los candidatos en un movimiento de integración en otro banco». No obstante, también señalan que el Popular y Liberbank «son entidades difíciles de comparar».
El mercado descuenta el riesgo de que Liberbank sea intervenido
«El mercado está descontando el riesgo de que Liberbank sea intervenido, un riesgo que siempre existe, pero día de hoy pensamos que la situación actual es distinta a la del Banco Popular y los riesgos son menores», reconocen desde Orey.
Hace unos meses, Banco Sabadell se posicionaba como el favorito para adquirir Liberbank, pero esa opción se desechó y la posición a día de hoy sigue siendo la de no tomar posiciones en la posible compra. De hecho, Oliu descartó entrar en la puja final por el Popular, en la que sólo participaron Santander y BBVA (esta última sin llegar a hacer una oferta).
De este modo, con Santander descartado por motivos obvios, el foco de atención se sitúa sobre el BBVA. En ese sentido, Francisco González, presidente de la entidad, aseguró esta misma semana que serían muy exigentes a la hora de comprar un banco físico. Esa es la posición de la compañía, pero fuentes financieras consideran que ahora le toca arrimar el hombro al segundo mayor banco del país tras el esfuerzo realizado por el Santander.
¿BBVA o CaixaBank?
Además, otras fuentes del sector avisan de que CaixaBank no ha olvidado del todo a Liberbank. Y es que a pesar que la entidad que preside Jordi Gual se encuentra aún digiriendo la OPA que culminó en el mes de febrero sobre el banco portugués BPI, aún baraja la opción de entrar en la puja.
De este modo, BBVA se posiciona como la favorita para absorber Liberbank en caso de que la sangría bursátil y la fuga de depósitos continúen, con Caixabank en la retaguardia a la espera de que se den las condiciones favorables para entrar en el juego.
El máximo accionista de Liberbank es la Fundación Bancaria Caja de Ahorros de Asturias, que controla el 44,8% del capital. Le siguen el fondo Oceanwood Capital Management (10,6%), la Fundación Bancaria Caja de Extremadura (9%), la Fundación Bancaria Caja de Ahorros de Santander y Cantabria (6,3%) y la Corporación Masaveu (5,7%).