La Ley Mbappé de Ayuso también beneficiará a los españoles expatriados que vuelvan a Madrid

La nueva Ley Mbappé de Ayuso que entrará en vigor en los próximos meses, también podrá aplicarse a los españoles expatriados que regresen a Madrid tras haber tenido su residencia fiscal en el extranjero durante al menos los últimos cinco años. Una ley que salió adelante a pesar de que contó con toda la oposición, incluyendo a Vox, que se opuso alegando que beneficiaría a los inversores extranjeros por encima de los españoles, y que el PP sacó adelanté en solitario una vez obtuvo la mayoría absoluta en la región madrileña.

La bautizada como Ley Mbappé propone desgravar un 20% del tramo autonómico a nuevos contribuyentes que fijen su residencia en la región madrileña y se aplica a «personas físicas no residentes en España», según reza el anteproyecto de la Ley. Todo ello, siempre que el interesado no haya sido residente fiscal en España «durante los cinco años anteriores al cambio de residencia a un territorio de la Comunidad de Madrid».

Inversiones dentro y fuera de España

«Además, la deducción del 20% en el tramo autonómico del IRPF del contribuyente por la inversión realizada se aplica tanto si se hace en una entidad constituida en la Comunidad de Madrid, como en cualquier otra parte del territorio español, o en el extranjero», subrayan desde la firma de abogados The Golden Partners, a lo que agregan: «Lo importante es que no sea un paraíso fiscal, según dicta la norma publicada por el momento». 

En opinión de los juristas, «es lógico que se permita que la inversión sea en cualquier parte del mundo para no contravenir el Tratado Maastricht, pues desde 2004 las restricciones a los movimientos de capitales y a los pagos, tanto entre Estados miembro de la Unión Europea como con terceros países están prohibidas».

«La Ley Mbappé, que no es un régimen fiscal nuevo sino una modificación del texto que regula el IRPF -Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas- cedido a la Comunidad de Madrid, beneficiará tanto a españoles como a extranjeros», según comentan desde el despacho experto en extranjería y fiscalidad de altos patrimonios.

Madrid pretende atraer riqueza

La Ley Mbappé de Ayuso recibió el visto bueno de la Asamblea madrileña el pasado abril y entrará en vigor de forma previsible en los próximos meses, si bien se aplicará de forma retroactiva desde principios del presente 2024. Según afirma el Gobierno madrileño, «la región atrae dos de cada tres euros que llegan a España como inversión desde el exterior». Sólo en los últimos 10 años, se ha multiplicado por dos «el flujo de inversiones, con un crecimiento medio anual del 9,7%, casi 2 puntos por encima de la media de España».

Ley Mbappé vs Ley Beckham

Otra de las grandes incógnitas es su compatibilidad con el régimen fiscal de impatriados. «No tienen nada que ver, la Ley Beckham es un régimen fiscal especial por el que el extranjero adquiere la condición de residente fiscal pero tributando tan sólo por sus rentas de fuente española con la sola excepción de las rentas del trabajo (el salario) que tributa por las generadas en todo el mundo. Ahora bien, las rentas quedan sujetas a un tipo reducido del 24% sobre sus primeros 600.000 euros y el exceso, al marginal del 47%». 

Por su parte, «la deducción del 20% de la conocida como Ley Mbappé de Ayuso», que no ha sido diseñada para el futbolista, aunque así se la conozca, «exige que el inversor adquiere la residencia fiscal en España con todas sus consecuencias, es decir; tributando al tipo marginal». Además, «en el caso de la legislación madrileña, se exige mantener la residencia fiscal en la Comunidad de Madrid durante 6 años», mientras que eso no sucede para el impatriado que solicita la Ley Beckham, «aunque en este caso, al ser tan beneficioso, le conviene agotar esos 6 años». 

Ahora bien, Isabel Díaz Ayuso ya ha ahorrado 153 millones de euros a los madrileños gracias a sus progresivas deflactaciones del IRPF madrileño con el objeto de «ayudar a las familias ante la subida de precios». Por ello, este tipo de medidas no hacen sino llamar a riqueza, de extranjeros y españoles, y sin contribuir a la especulación inmobiliaria, pues en la nueva Ley Mbappé de Ayuso quedan proscritas las inversiones en entidades de carácter inmobiliario.