Jesús Calleja rechaza su jubilación: esto es lo que le quedaría de pensión de la Seguridad Social y lleva razón
El caso del famoso presentador se podría prejubilar si lo deseara
Ni Roma ni París: el paraíso a una hora de España para emigrar si tienes más de 60 años y vivir de lujo con 1.000€
Ni Suiza ni Luxemburgo: la joya europea a dos pasos de España para emigrar y vivir de lujo como jubilado con 1.000€


Jesús Calleja es uno de los rostros más populares de la televisión. Presentador de programas como Universo Calleja o Planeta Calleja, pudo cumplir recientemente su sueño de viajar al espacio y todo ello con 60 años, una edad en la que ya se podría comenzar a plantear la jubilación. De hecho, según la normativa de la Seguridad Social su perfil es apto para prejubilarse, pero él lo descarta.
El aventurero leonés sigue demostrando que tiene energía para rato, por lo que mientras otros a su edad ya cuentan los años cotizados con el fin de retirarse, en su caso, la opción parece lejana y más si tenemos en cuenta que en la reciente rueda de prensa para presentar la nueva temporada de su programa Volando voy, volando vengo dejó claro que la edad para él es sólo un número y que no tiene pensado jubilarse. Pero entonces, ¿qué pasa con su pensión? ¿Qué le correspondería a alguien como él después de tantos años de trabajo y cotización? Aunque podría optar por retirarse de forma anticipada, Jesús Calleja no tiene ganas de alejarse de su trabajo y su pasión por la aventura y los viajes. Pero además más allá de las ganas por lo que hace, también hay datos objetivos que explican su decisión. Os lo explicamos al detalle, a continuación.
Jesús Calleja rechaza su jubilación
A lo largo de su vida profesional, Jesús Calleja ha alcanzado logros que pocos pueden siquiera soñar: ha coronado los picos más altos del planeta, participado en competiciones extremas como el Rally Dakar, y en febrero de 2024 se convirtió en el tercer español en viajar al espacio. Lo hizo a bordo de la nave New Sheppard de Blue Origin, como parte de un proyecto que, aunque exclusivo, le permitió dar otro salto más en su carrera: salir de la Tierra.
Todo esto mientras mantiene una presencia constante en televisión, ahora con su programa veraniego ‘Volando voy, volando vengo’, A través de sus emisiones, sigue recorriendo la geografía española, contando historias humanas, conectando con pueblos, y recordándonos que la aventura también está a la vuelta de la esquina. Para Calleja, el motor sigue siendo la curiosidad, la ilusión y las ganas de seguir aprendiendo. ¿Jubilarse? Ni se lo plantea.
¿Podría jubilarse Jesús Calleja?
Legalmente, Jesús Calleja ya está en la cuenta atrás para poder optar a la jubilación anticipada. La legislación vigente en España permite retirarse a los 63 años si se han cotizado al menos 38 años y seis meses. En su caso, con más de 38 años de trayectoria laboral, ya cumple ese requisito. Y si ha cotizado por la base máxima (algo bastante probable dado su nivel profesional y su contrato en Mediaset) podría acceder a la pensión máxima: 3.267,60 euros al mes, lo que equivale a 45.746,40 euros al año con la subida del 2,8% prevista para 2025.
Sin embargo, Calleja lo tiene claro: su trabajo es su forma de vivir. En una entrevista reciente, con motivo del estreno de su programa, lanzó una reflexión que define su filosofía vital:»La edad no es más que un número inventado por los humanos. Lo importante es la edad mental, las ganas de tener proyectos. Los proyectos te dan vida, te hacen feliz». Y no le falta razón. Hay quienes, incluso con una buena pensión sobre la mesa, prefieren seguir activos porque sienten que aún tienen mucho que aportar.
¿Tiene su futuro asegurado?
Además de su faceta como comunicador y aventurero, Jesús Calleja lleva más de una década demostrando también su olfato para los negocios. En 2009 fundó Zanskar Producciones S.L., una empresa que se ha consolidado como una de las piezas clave en su carrera audiovisual. Gracias a este proyecto ha producido muchos de sus programas y ha diversificado sus ingresos, algo que, sin duda, le ofrece mayor libertad a la hora de decidir si quiere o no jubilarse.
Tener una empresa consolidada, ingresos estables y probablemente algún plan privado de pensiones, le permite a Calleja mirar al futuro sin agobios. Y eso cambia mucho las cosas. Porque una jubilación no siempre responde a una necesidad económica; en su caso, sería más una decisión vital. Por eso, mientras otros colegas de profesión como Jordi Hurtado, Ana Rosa Quintana o Bertín Osborne siguen activos más allá de los 65, él se suma a ese grupo que reivindica seguir trabajando por elección, no por obligación.
En definitiva, Jesús Calleja representa a ese grupo de personas que no quiere que la jubilación sea sinónimo de retiro pasivo, sino de libertad para elegir. Su historia pone sobre la mesa un debate necesario: ¿deberíamos medir la vida laboral solo en años, o también en ilusión y propósito? Porque para muchos, como él, trabajar sigue siendo la mayor aventura, a pesar de que está claro que también dependerá mucho de la situación de cada persona, el trabajo que haya desarrollado y los años que lleve realizando la misma labor.