La hostelería y el comercio perderán 400 millones si se cancela la Feria de Abril por la reforma laboral
La Feria de Abril está en peligro. Los caseteros han convocado un paro del 30 de abril al 7 de mayo por las importantes limitaciones a la contratación temporal que introduce la reforma laboral del Gobierno de Pedro Sánchez. La cancelación este evento tendría consecuencias devastadoras para la economía de la capital hispalense, ya que el comercio y la hostelería dejarían de ingresar cerca de 400 millones de euros en algo más de una semana.
Así lo ha confirmado Juan Tejada, vocal de la Asociación de Hosteleros de Sevilla, en conversaciones con este diario que ha señalado que «los establecimientos de hostelería y comercio se juegan en la Feria de Abril cerca de 400 millones de euros, este es el acontecimiento más importante del año para la ciudad, junto con la Semana Santa, y su cancelación podría afectar a miles de negocios que ya vienen muy tocados por los efectos derivados de la crisis del coronavirus y ahora golpeados por el aumento de la inflación».
«Concretamente, para Sevilla, el mes de abril supone entre un 60% y 70% de la facturación anual y hay establecimiento que incluso duplican el número de trabajadores empleados en comparación con una semana normal», aseguran. Además, avisan de que «la cancelación de la Feria de Abril puede provocar un desastre económico en la ciudad». No obstante, este paro que no sólo afecta a bares, restaurantes, hoteles y comercios, sino también al sector de la moda flamenca o de las artes escénicas.
Y es que no hay mayor negocio en Sevilla que el de la Feria de Abril. Con creces, es el evento económico de la ciudad y se convierte en la semana más importante del año, ya que supone el 3% del Producto Interior Bruto (PIB) de la ciudad. Hay un importante negocio generado por los propios sevillanos, pero también otro por los turistas tanto nacionales como internacionales, algunos de ellos de algo nivel adquisitivo.
Los caseteros en pie de guerra
Los empresarios que se encargan de prestar servicio en las casetas han justificado el paro ante «la falta de respuesta» a la reivindicación de una «necesaria y específica regulación» laboral para este sector por sus «singulares condiciones» y para reclamar al tiempo la «aplicación de un régimen especial». Han apuntado a la reforma laboral como causa de las «importantes limitaciones» a la contratación temporal, unas condiciones que «dificultan y hacen prácticamente inviable», a su juicio, la actividad en las ferias.
Por ello, y después de una asamblea celebrada el pasado martes, la asociación ha decidido «por unanimidad» convocar un paro de la actividad desde este pasado jueves para exigir un régimen especial que «tenga en cuenta las particularidades del sector, al igual que sucede con otras profesiones o sectores, como pueden ser el personal en instituciones sanitarias o la relación laboral de carácter especial de las personas dedicadas a las actividades artísticas».