De Guindos: «Reducir el déficit en 20.000 millones este año habría perjudicado a la economía española»

El ministro de Economía en funciones, Luis De Guindos, ha comparecido voluntariamente hoy en el Congreso de los Diputados para defender el nuevo plan de estabilidad 2016–2019 de la economía española y el plan nacional de reformas, documentos que deberán ser aprobados en Consejo de Ministros y ser enviadas a la Comisión Europea antes de que finalice el mes de abril, aunque el Gobierno ya las ha presentado al comisario de Economía Pierre Moscovici, que ha dado su visto bueno, tal como avanzó OKDIARIO.

El nuevo cuadro macroeconómico contempla una reducción de la previsión de crecimiento del PIB hasta el 2,7% para 2016 (tres décimas menos que lo estimado en los Presupuestos Generales del Estado), una tasa que será del 2,4% para el próximo ejercicio.

El ajuste se repartirá entre el Estado y las CCAA, dejando fuera a la Seguridad Social

Estas cifras fueron avanzadas por el ministro el pasado fin de semana, y hoy todo el mundo esperaba conocer cuales son los nuevos objetivos de déficit público, ante el incumplimiento de los compromisos del pasado año, cuando la brecha entre gastos e ingresos públicos se disparó al 5% del PIB, frente al 4,2% prometido a Bruselas. El nuevo plan estima un déficit público del 3,6% en 2016 (frente al 2,8% anterior) y del 2,9% para el próximo año.

Esto revela que el Gobierno acepta la imposibilidad de cumplir con el anterior plan de estabilidad, lo que habría requerido de un ajuste de 20.000 millones de euros este año, lo que supone «una reducción muy intensa que tendría un impacto muy negativo para el crecimiento» y que «pondría en peligro el enorme esfuerzo realizado por las familias y empresas españolas» en los últimos años», según ha indicado De Guindos en sede parlamentaria.

De Guindos ha apuntado que «la senda del reducción del déficit es ineludible, no sólo porque nos los haya solicitado la Unión Europea, sino porque es necesario para la economía española». Los mayores riesgos son, en estos momentos, el elevado endeudamiento, la crisis financiera internacional y la elevada tasa de paro que, según la última revisión, cerrará el año en el 19,9%. En 2017 el porcentaje de desempleados se situará en el 17,9% de la población activa.

España será el país que más crecerá de las economías desarrolladas

No obstante, el ministro de recordó que hay «vientos de cola» que permitirán a España «seguir siendo el país que más crece de todas las economías avanzadas», entre las que destacó la bajada del precio del petróleo y la asistencia financiera del Banco Central Europeo (BCE). El nuevo cuadro macroeconómico se ha elaborado con una previsión de precio del barril de crudo Brent de 39,7 dólares para este año y de 45,3 dólares para el que viene.

De Guindos ha explicado que el Gobierno sólo ha planteado medidas de ajuste del déficit para el conjunto de este ejercicio, dejando al futuro Gobierno la adopción de reformas que sigan reduciendo la brecha fiscal. La corrección en 2016 vendrá de la mano de la reducción de 2.000 millones de gasto por parte del Estado (anunciada por Montoro) del plan de ajuste de las comunidades autónomas y «de la aportación del ciclo económico». Para la Seguridad Social no se contempla ajuste alguno.

Desplome de ingresos previstos y el agujero de la Seguridad Social

Sin embargo, lo que no explicó el ministro es que esta rebaja de tres décimas en el crecimiento esperado supone, aproximadamente, un desplome del 10% de los ingresos públicos previstos. Este factor, junto con los números rojos de la Seguridad Social que rozan los 17.000 millones de euros, van a dificultar que se cumplan las estimaciones presentadas hoy en el Congreso.

Los distintos grupos parlamentarios criticaron a De Guindos por no haber facilitado la documentación necesaria para evaluar los dos nuevos programas (el plan de estabilidad y la agenda de reformas), ya que su departamento sólo ha entregado el nuevo cuadro de previsiones macroeconómicas.

Además, todos los diputados que interpelaron al ministro recordaron que este nuevo programa de ajuste no ha sido entregado a la autoridad fiscal independiente (AiREF), que fue creado tras el rescate financiero europeo para fiscalizar las cuentas públicas españolas.

Precisamente, ayer este organismo criticó al Gobierno porque no ha podido emitir en el plazo legal establecido, que finalizó el 15 de abril, su informe y recomendaciones sobre el programa financiero que mandará España a Bruselas.

Según ha avanzado OKDIARIO, las autoridades europeas van a permitir a España esta relajación de sus compromisos presupuestarios, aunque es posible que la Comisión realice recomendaciones al próximo Gobierno para cumplir con el nuevo compromiso de déficit. De Guindos ha explicado que el nuevo plan de estabilidad ya lo conocen las autoridades europeas desde el pasado sábado.