Cosentino, empleo y formación para vertebrar el territorio

El compromiso con las personas, su empleabilidad y su formación, es uno de los principales valores de Cosentino, la firma española líder en superficies sostenibles para la arquitectura y el diseño. Una apuesta por la educación y la generación de empleo focalizada en las generaciones más jóvenes para apoyar y promocionar su talento, y ofrecerles las herramientas para que se conviertan en los mejores profesionales del futuro. Para ello, la compañía impulsa distintas iniciativas que hacen de Cosentino una de las empresas más implicadas con la educación de los jóvenes en su comunidad.

Las cifras de empleo avalan dicha apuesta. En 2023, la empresa aumentó un ejercicio más su plantilla, con 188 nuevos puestos de trabajo, alcanzando a cierre del año pasado un total de 6.039 empleados en todo el mundo, lo que supone un incremento del 27,4% desde 2020. De ellos, el 58% se ubica en España, más concretamente en la sede central de Cosentino en Cantoria, Almería. Y el 98% de toda la plantilla del grupo cuenta con contrato indefinido. Un ejemplo tangible, como apuntan desde la propia empresa, de que el tejido industrial es el mejor puntal para generar empleo de calidad, y de ofrecer un ascensor social al que se accede vía formación y esfuerzo individual.

El caso de Cosentino es paradigmático. Con sus oficinas principales y un parque industrial de cerca de 4 millones de m2 ubicados en la Comarca del Almanzora, Almería, ha mostrado que la industria faculta fijar población en la llamada España vaciada. Apostar por los jóvenes, formarlos en el marco de las demandas del mundo globalizado y tecnológico de hoy en día, y facilitarles una trayectoria profesional. En definitiva, articulación social, económica y territorial.

FP Dual y Programas de captación

Una palanca por la que Cosentino ha apostado con fuerza desde hace años es la Formación Profesional Dual. Una apuesta desde el entendimiento de que era necesario orientar esta formación a las necesidades de su industria. En 2020, Cosentino se convirtió en una empresa referente de la FP Dual con la puesta en marcha de su primer proyecto de Ciclo de FP Dual para el Grado Superior de Mecatrónica Industrial. La compañía fue la primera empresa de Almería en implantar el sistema Dual para este tipo de enseñanza. Luego ha ido incrementando su apuesta y, de la mano de la Junta de Andalucía, ha ampliado los programas becados hasta contar en la actualidad con cinco titulaciones (Grados Medios y Superiores), cuatro de ellas en Dual. De nuevo, otro dato como muestra: desde su implantación, el 85% de los estudiantes de estos ciclos ha acabado formando parte de la plantilla cuando finalizó su formación.

Este eje, estratégico, se combina con diferentes programas pioneros de captación de talento, remunerados y de seis o doce meses de duración, dirigidos a recién titulados, pero siempre con el paraguas del sector industrial. Son los casos de los Programas “Impulsa”, en los que se ofrecen prácticas profesionales a alumnos que hayan finalizado su formación profesional en una rama industrial; “Acelera” o “Ingenia”, cuyo última edición acaba de arrancar, y que está dirigido a recién titulados en carreras STEM. Líneas que se completan con otros programas activos en la actualidad como “Designia”, en su primera edición y que ofrece una oportunidad laboral a nivel internacional para jóvenes arquitectos y diseñadores, o “Proyecta”, impulsado junto a Cruz Roja y la Escuela del Mármol de Fines para buscar perfiles fabriles o de producción.

Fundación Eduarda Justo

Pero dónde más apreciable es el objetivo de cohesionar y vertebrar su territorio es en la actividad de la Fundación Eduarda Justo. Desde su creación en 2006, la Fundación creada por Cosentino trabaja de forma permanente para impulsar el entorno social cercano de la compañía, contribuyendo al desarrollo formativo y cultural de la provincia de Almería, y ofreciendo acceso al talento joven, especialmente al de recursos más limitados, a un ecosistema más amplio de oportunidades.

La entidad promueve iniciativas tales como el proyecto “Escuelas Líderes” bajo la premisa de mejorar la formación de los formadores, potenciando a las comunidades educativas; la cita anual “Líderes del Futuro”, seminario de formación intensivo, con 16 ediciones ya celebradas, especializado en liderazgo que busca inspirar a más de 100 jóvenes profesionales con elevado potencial a liderar el cambio; o la más reciente iniciativa “Debate Almería. El poder de la palabra”, programa para proporcionar a los jóvenes almerienses, independientemente de sus posibilidades económicas, una formación en habilidades de comunicación y pensamiento crítico.

Estos proyectos se unen al amplio programa de becas de la Fundación, como las que llevan su nombre y con más de 10 años ya de andadura, en las que se becan a jóvenes almerienses preuniversitarios con alto potencial para que cursen dos años de Bachillerato en la red de Colegios del Mundo Unido (UWC). Otra línea relevante son las Becas Canadá TECH, de dos años de duración, combinando 1º de Bachillerato en Canadá, y el segundo año a través de un programa formativo complementario a sus estudios de 2º en su centro escolar.

Todo ello apuntala una visión que persigue aquel viejo anhelo de Ortega y Gasset. Desarrollar una compañía, un modelo de negocio que se constituya en un “proyecto sugestivo de vida en común”. Que cohesione social y territorialmente a una comunidad, con un impulso nuevo, acorde a los tiempos, y que sea factor clave para la competitividad.