Cataluña, la comunidad donde la banca cierra más oficinas y prescinde de más empleados
La marcha de Sabadell y Caixabank de la comunidad fue solo una de las malas noticias desde el 11 de septiembre de 2017
Con una fuga de depósitos de 15.683 millones, el sistema bancario catalán se tambaleó tras el 1 de octubre
Un año después de la diada del 11 de septiembre de 2017 que dio el pistoletazo de salida a la parte más álgida del desafío secesionista de la Generalitat de Carles Puigdemont contra el Estado, la banca catalana y su sistema bancario muestra los peores números tanto en términos absolutos como relativos.
Cataluña ha perdido 187 sucursales en el año 2017 según datos de la Asociación Española de Banca (AEB). En ese periodo, la Comunidad Valenciana perdió 96 oficinas siendo la segunda con peores resultados. Sin embargo, la Comunidad de Madrid perdió 74 oficinas en este periodo. Sin embargo lo llamativo viene con respecto a los empleados: Cataluña perdió 387 empleados de año a año mientras que Madrid ganó 149 trabajadores.
En este periodo, otras comunidades muy pobladas como Andalucía apenas perdieron 7 oficinas. Pero en general, la tónica de todo el país ha sido la pérdida de entidades financieras.
Un colapso en los depósitos
Especialmente nefasto para el sector bancario ha sido el independentismo en cuanto al tema de los depósitos, uno de los principales negocios bancarios y cuya estabilidad garantiza la viabilidad del negocio bancario. En el año 2017 se perdieron 15.683 millones de euros en depósitos en Cataluña según datos de la AEB. La comunidad pasó de tener 102.800 a 87.000 millones de euros en depósitos. Es con mucha diferencia la que más depósitos perdió en 2017.
En este mismo periodo, la Comunidad de Madrid perdió más de 6.000 millones en depósitos, una cantidad que sin embargo no es elevada si se tiene en cuenta que dicha región acumula más de 227.000 millones en depósitos, un 35% del total.