Cae la confianza de las empresas españolas sobre la evolución de su negocio en 2020
Cae la confianza de las empresas españolas sobre la evolución de su negocio de cara a 2020. Así lo refleja la Encuesta de Perspectivas Empresariales en España y Europa 2019, coordinada por Eurochambres con la participación de la Cámara de Comercio de España, realizada a casi 3.600 empresas españolas y 53.000 europeas.
La encuesta -analiza exportaciones, empleo, inversión y ventas nacionales- refleja también que las empresas españolas son más optimistas que las europeas en las tres primeras y, particularmente, en lo que se refiere a la evolución de las exportaciones.
En conjunto, aunque las expectativas de las empresas tanto europeas como españolas en 2020 son favorables empeoran respecto al ejercicio 2019 y confirman la ralentización de la economía española de cara al próximo año, en línea con las grandes casas de expertos del país y con el propio Gobierno socialista.
Menor demanda nacional
La desaceleración prevista para 2020 volvería a tener su origen en la menor aportación de la demanda nacional, en línea con este año. Por el contrario, las buenas perspectivas respecto a la evolución de las exportaciones indican que el sector exterior se consolida como motor clave del crecimiento económico.
Las empresas esperan un comportamiento positivo del empleo en 2020, lo que permite esperar que la economía siga creando puestos de trabajo durante el próximo año, aunque a menor ritmo que en 2019.
Asimismo, el estudio señala que la demanda nacional será el principal factor que condicionará la actividad de las empresas españolas en el próximo año, según el 73,5% de las empresas.
Para las firmas del conjunto de la UE, la demanda nacional también se constituye como el principal elemento que afectará a los negocios en 2020 y en segundo lugar se sitúa la escasez de personal cualificado. Tanto en este caso como en lo relativo al precio de la energía y materias primas, las condiciones de financiación y el Brexit, las empresas españolas muestran menor preocupación que sus homólogas del conjunto de la UE.
Peor en Europa
A nivel europeo, las expectativas de las empresas sobre la marcha de sus negocios también empeoran respecto a 2019. Los saldos se reducen en todas las variables, sobre todo en lo que respecta a exportaciones (13 puntos menos), inversión (8 puntos menos) y empleo (6 puntos menos). «Los comportamientos de estos indicadores podrían estar avanzando una mayor ralentización de la economía europea debido a la moderación de la demanda externa», explica.
La media europea disminuye lastrada por la menor confianza de las empresas alemanas e italianas y, sobre todo, por la evolución negativa en la confianza de las compañías francesas. En ventas nacionales las perspectivas para el próximo año son positivas en todos los países europeos.
Las empresas de Portugal, Polonia y Chipre son las que registran el saldo más elevado, mientras que las más pesimistas se localizan en Francia, Eslovaquia e Italia. En el caso de las exportaciones, las expectativas para 2020 son favorables en todos los países, excepto Alemania y Francia cuyas empresas esperan descensos de sus ventas al exterior. No obstante, matiza que los efectos de la incertidumbre derivada de la guerra comercial podrían manifestarse más intensamente en estos países.