El Brexit y Trump han sido las dos sorpresas del año con más impacto en la economía internacional
Un 2016 lleno de momentos históricos, hitos que en unos años llenarán las páginas de los libros de texto y serán analizados concienzudamente por expertos e inexpertos. Han sido doce meses llenos de emociones económicas que han tenido consecuencias sociales, culturales y políticas. El Brexit, el crecimiento de la economía china aunque con fuga de capitales, así como la subida de tipos en EEUU o las elecciones presidenciales que han llevado a Donald Trump a la Casa Blanca. Podrían ser estas las claves de un año estrepitoso y que ha dejado sin aliento a más de uno.
Una sorpresa inesperada: el Brexit
El susto comenzaba en Europa en el mes de junio, los británicos acudían a las urnas y decían sí a salir de la Unión Europea (UE). El Brexit se había impuesto, el resto del Viejo Continente miraba atónito a un escenario que pensaban que no se iba a dar. La decisión del pueblo inglés sacó a David Cameron de Downing Street para dejar paso a Theresa May. El mismo día de la consulta, Las bolsas mundiales se dejan casi un billón de euros en capitalización, la libra se desploma más del 8 % frente al dólar y el petróleo cae el 5 % por la inesperada victoria del Brexit.
La primera ministra anunciaba un Brexit duro, salir de Europa con todas las consecuencias, para el mes de marzo de 2017. Será, sin duda, un año igual o más atareado para Bruselas que 2016. La decisión de Reino Unido, así como la chulería en el proceso del Brexit de May, descalabraron la libra durante varias semanas.
Los expertos esperan que la economía inglesa se resienta en 2017 y 2017 con motivo de este Brexit, aunque, como decía Daniel Pingarrón (IG Markets) a OKDIARIO, “parece que al Gobierno de May no le preocupa mucho, al menos a corto plazo”. Aun así, en agosto, el Banco de Inglaterra baja los tipos de interés, por primera vez en siete años, hasta el mínimo histórico del 0,25 % para afrontar el impacto de la salida de Europa.
El salvaje desplome de las bolsas chinas
El mercado chino no comenzó el año con buen pie, las bolsas chinas sufrieron en el mes de enero un desplome del 7% que arrastró a los mercados mundiales. China puso en jaque una de las economías que más crecían del mundo y, no solo eso, que tiene en sus manos gran parte de la deuda pública de los principales países, como EEUU.
Los bandazos de los índices chinos eran tan fuertes que la Comisión Reguladora del Mercado de Valores de China tuvo que suspender el 7 de enero la sesión bursátil. Solamente duró media hora, la jornada más corta de la historia. Unos números rojos que vinieron después de que el Banco Central Chino llevara a cabo la mayor depreciación del yuan frente al dólar desde agosto de 2015, además informaba de que el nivel de reservas de divisas extranjeras descendía en diciembre a su nivel más bajo en tres años.
Vaivenes en las Bolsas con la llegada de Trump
El 9 de noviembre los estadounidenses iban a votar a su nuevo presidente o presidenta, el mercado daba por hecho que Hillary Clinton sería la elegida por los ciudadanos. Incluso Wall Street cerró con ganancias considerables, los analistas apostaban fuerte por la demócrata. Nada más lejos de la realidad, a mediados de noche el mapa de EEUU comenzaba a llenarse con el nombre de Donald Trump.
Los presagios que muchos no deseaban se cumplían: el magnate hotelero se erigía como el nuevo inquilino de la Casa Blanca. Las bolsas asiáticas se dieron la vuelva y comenzaron a caer estrepitosamente, una situación que se daría durante dos jornadas más.
El efecto Trump impregnó de volatilidad los mercados mundiales, tanto los europeos como los de EEUU, aunque finalmente todo se mitigó y el Dow jones vivió una explosión alcista que le llevó a superar por primera vez en la historia los 19.000 puntos básicos. Lo que pasará en 2017 es complicado de adivinar, a partir de 20 de enero cuando Trump tome posesión y comience a tomar medidas veremos qué ocurre con Wall Street y el resto de plazas.
La esperada subida de tipos de la Fed
A final de año venía la esperada subida de tipos por parte de la Reserva Federal. Janet Yellen anunció a mediados del mes de diciembre una subida de tipos de un 0,25% ubicándolos en una horquilla entre el 0,50% y el 0,75%, una decisión que fortaleció el dólar para ir camino de tener paridad con el euro.
Las expectativas de inflación ante los prometidos estímulos fiscales y el recalentamiento de la economía de EEUU (con un mercado laboral en pleno empleo y la Bolsa en máximos históricos) han sido los factores que están detrás de la decisión de la institución que dirige Yellen. Así es como la Fed recibía al nuevo presidente del Gobierno de los EEUU, con una decisión aplaudida por los inversores y mirada de reojo por Europa.