Las propuestas de PP y Vox alivian a las clases medias con una bajada generalizada de impuestos
La derecha española pisa el acelerador fiscal ante la cercanía de las elecciones del próximo 23J. La misma semana en que el Banco de España informaba que los españoles perdieron un 4,5% de poder adquisitivo entre 2020 y 2022, las formaciones de Alberto Núñez Feijóo y Santiago Abascal han presentado sus programas económicos con una clara apuesta por la clase media: rebajas o eliminación de tributos directos como los Impuestos sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), sobre el Patrimonio (IP), sobre Sucesiones y Donaciones (ISD) o las Plusvalías municipales; pero también a través de una rebaja temporal o definitiva del IVA que grava los productos de primera necesidad.
Si hace apenas unos días el Partido Popular daba a conocer en la Cámara de Comercio de la capital su programa electoral, este viernes Vox ha hecho lo propio con su programa económico a través de una rueda de prensa ofrecida por el vicepresidente primero de Acción Política de Vox, Jorge Buxadé, e Iván Espinosa de los Monteros, el portavoz de la formación de Santiago Abascal en el Congreso y vicesecretario de Exteriores del partido.
Estos son los impuestos que más afectan a las economías domésticas y que OKDIARIO ha desglosado para comprender cómo la derecha española modificaría, rebajaría o incluso derogarían los tributos directos e indirectos, en caso de llegar a la Moncloa el próximo mes de agosto.
IRPF
Aunque en el programa del PP tan sólo se cita una “corrección de efectos de la inflación de la tarifa” para combatir “la subida real de impuestos sobre la clase media”, fuentes de la formación azul adelantaron a este digital que aprobarían una deflactación de la tarifa estatal para las rentas anuales por debajo de los 40.000 euros brutos durante sus primeros 100 días de gobierno. Una apuesta por aliviar el IRPF que el propio presidente del partido confirmó apenas unos días después.
Por su parte Vox da un paso más y defiende «un tipo único reducido del 15% para bases imponibles inferiores a 70.000 euros y un tipo ordinario del 25%» para las que estén por encima de dicha cantidad. También, una «exención de 22.000 euros anuales de rentas del trabajo», es decir; a todos los salarios; «con independencia de tener uno o dos pagadores».
Para luchar con el grave problema de acceso a la vivienda, el PP apuesta por bonificaciones en el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales Onerosas y Actos Jurídicos Documentados (ITP-AJD) o el IBI al comprar una vivienda en el medio rural. También, por un programa de avales para jóvenes de hasta 35 años, facilitando la concesión de créditos hipotecarios por valor de hasta un 95% de la totalidad del precio de la vivienda. Vox da un paso más y pide recuperar la deducción por inversión en vivienda habitual en el IRPF y extender a todo el territorio la deducción por costes de alquiler.
La fórmula de Abascal para reducir el precio final de la vivienda es asegurar la igualdad entre españoles en los impuestos cedidos, «esencialmente en el ITP-AJD», para después reducir su tipo general del 1,5% al 0,5%. Además, Vox desea bonificar al 100% este tributo para la compra de vivienda habitual, siempre que esta sea inferior o igual a 300.000 euros y, reduciéndolo en todo caso al 6% y 3% para familias numerosas.
Otro elemento de notoriedad en la reforma fiscal del IRPF propuesta por Vox es su clara apuesta por la familia: reducciones en la base imponible por contratar asistentes y personal sanitario en el hogar o una nueva deducción por nacimiento o adopción de hasta 2.750 por el cuarto hijo y en adelante.
IVA
Ambos partidos políticos coinciden en bajar radicalmente este impuesto indirecto. Mientras el PP concreta que acometería la reforma «con carácter temporal a la carne, pescados y conservas», Vox prefiere «revertir la subida realizada en 2012» para pasar de nuevo «al tipo reducido del 8% y del general al 18%». De hecho, apuesta por extender esta rebaja a «productos y fármacos infantiles, pañales o productos geriátricos» e incluso «eliminar el IVA para la adquisición de la primera vivienda habitual» y «eliminar la doble imposición que se produce sobre los artículos a gravados con impuestos especiales», en quizás referencia a los que afectan al tabaco o a las bebidas alcohólicas, e incluso las azucaradas y edulcoradas -estas últimas cuyo IVA fue aumentado del 10% al 21% por el Ejecutivo de Sánchez.
La formación de Abascal apuesta también por «revertir las subidas de más de 17 puntos en el material escolar, así como en cine y peluquerías», sin que la lista de negocios a los que ayudar sea cerrada.
Patrimonio y Grandes Fortunas
Mientras que el PP apuesta por eliminar el Impuesto sobre las Grandes Fortunas, ese tributo aprobado por la puerta de atrás que durante este mes de julio deberán ingresar los sujetos pasivos; Vox promete suprimir el Impuesto sobre el Patrimonio, el de Sucesiones y Donaciones y las Plusvalías municipales; en todos lo casos, en todo el territorio nacional.
Por último, cabe destacar la propuesta de Feijóo para incorporar el «derecho al error» en el ordenamiento tributario, de forma tal que se minimicen los errores de los contribuyentes en sus declaraciones; o la propuesta de Vox de que la Administración no pueda iniciar un expediente sancionador por las cantidades a devolver procedentes de las autoliquidaciones rectificativas, en su «objetivo por proteger a las familias».