Gran Premio de Miami

Miami lo confirma: Verstappen y Alonso son los reyes de la Fórmula 1

Miami Verstappen Alonso
Verstappen rodando en Miami. (Getty)
Guillermo Sáez

Max Verstappen y Fernando Alonso son los reyes de la Fórmula 1. El holandés, que partía desde la novena posición, dio un estruendoso golpe encima de la mesa y completó una remontada memorable en el Gran Premio de Miami para vencer por delante de su compañero Sergio Pérez. Justo por detrás de ambos acabó el español, que suma su cuarto podio en cinco carreras con Aston Martin. Cuarta posición para George Russell y quinta para Carlos Sainz, que se desinfló y además fue víctima de una sanción.

Se presumían emociones fuertes en la salida, después de la tormenta caída el día anterior que podía hacer el agarre en la zona limpia aún más complicado. Nada de Nada. Fue un arranque muy limpio, casi de peaje de autopista, en el que todos los favoritos conservaron sus respectivas posiciones sin demasiados agobios, pero al mismo tiempo sin opciones de progresar.

Así que el trío hispano de moda comandó la carrera manteniendo la secuencia Pérez-Alonso-Sainz, mientras un torbellino se empezaba a desarrollar unos metros más atrás. Verstappen, que partía noveno por culpa del accidente de Leclerc en la clasificación, se lanzó a por la remontada y empezó a pasar rivales a cuchillo con una facilidad pasmosa.

Cuando el mejor coche -con mucha diferencia- se fusiona con el talento de un bicampeón mundial, lo normal es que ocurran este tipo de cosas. En la vuelta 15, el holandés ya era segundo después de pasar por último a los dos pilotos españoles, que solo pudieron ver a un avión pasando a su lado y quitándoles las pegatinas. Cuando es imposible plantar batalla, lo mejor es no meterse en líos.

Se inició entonces una nueva carrera con dos luchas paralelas: la de los pilotos de Red Bull por la victoria y la de los pilotos españoles por la última posición del podio. Tan motivado iba Sainz por ganarle el duelo a su compatriota que cometió un error en su entrada a ‘boxes’ para cambiar neumáticos. Ingresó pasadísimo, bloqueó frenos y recibió una sanción de cinco segundos por exceso de velocidad.

Miel para Alonso. El asturiano entró a ‘boxes’ en la vuelta 25, salió por detrás de Sainz y con neumáticos nuevos le lanzó un ataque feroz para recuperar de nuevo la posición. Con media carrera por delante, solo tenía que gestionar los neumáticos y mantener el buen ritmo de su Aston Martin para subir al cajón por cuarta vez esta temporada. Lógicamente, lo hizo sin ningún problema.

En cuanto al mundo aparte donde pelean los Red Bull, a falta 12 vueltas de llegó el momento que decidiría al vencedor: la parada de Verstappen en ‘boxes’. El holandés no logró adelantar al mexicano, pero volvió al asfalto a poco más de un segundo de distancia. Habría batalla final por el triunfo en Florida, aunque el bicampeón mundial liquidó la emoción por la vía rápida: encimó a su compañero y lo rebasó con mucha autoridad con 10 giros por completar. Es un abusón.

Pérez intentó agarrarse a su rueda, pero nada pudo hacer. Simplemente, Verstappen es un piloto mejor. Uno de la categoría de Fernando Alonso. Son los dos reyes de la Fórmula 1, qué pena que no lleven el mismo coche y no puedan batirse de verdad sobre el asfalto. Quizá el año que viene… El ovetense mantenía a raya como quería a Russell, que había adelantado a Sainz, y se dedicaba a conversar con sus ingenieros sobre lo que veía en las pantallas gigantes. Qué temporada la suya, la del indiscutible padre de la Fórmula 1 que volvió abrir el champán junto a los pilotos de Red Bull.

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