La Fórmula 1 es un clamor contra la nueva calificación: «Es una basura»
«El nuevo formato es una basura». Así de contundente se ha mostrado Toto Wolff, el director deportivo de Mercedes tras la primera calificación con el nuevo sistema. La frase del austriaco resume el malestar de todo el circo en el arranque del Mundial de Fórmula 1 este fin de semana en Australia. «Todo el mundo está haciendo todo lo posible para mejorar el espectáculo. Y si no lo hacemos, tendremos que debatirlo», añadió.
El hecho de que Lewis Hamilton se bajase de su coche a tres minutos del final con la pole en el bolsillo o la foto de Sebastian Vettel paseando por el paddock cuando aún no había acabado la Q3 han terminado por ser la chispa que ha hecho estallar la indignación. El nuevo sistema de clasificación, que fue aprobado hace solo unas semanas por el Grupo Estratégico de la Fórmula 1, incitó a la mayoría de pilotos a no luchar por la pole. El objetivo fue ahorrar neumáticos para la carrera de este domingo, en la que los Mercedes parecen inalcanzables.
«Favorece a los equipos grandes cuando tendría que ser al revés. La Q3 se ha convertido es un grupo exclusivo al que sólo pasan ocho coches. Los pequeños utilizamos todos los juegos nuevos de neumáticos al principio para poder pasar a la Q2 y luego llegamos sin esta ayuda», dijo Fernando Alonso.
Carlos Sainz aseguró haber sentido «caos y frustración». «A mí no es al que me tiene que gustar. Le tiene que gustar al que lo ve por televisión. Hay que analizarlo para mejorar. Es demasiado apretado el tiempo y no te puedes organizar. Lo peor de este sistema es el final», añadió.
«Hay que pedir perdón a los aficionados»
Totalmente de acuerdo con Wolff se mostró Helmut Marko, asesor de la escudería Red Bull. «Sí, por supuesto que es una basura. Supongo que no lo tendremos en Bahréin. Ecclestone ha dicho que hay que pararlo y volver al sistema antiguo», añadió. Por su parte, Christian Horner, jefe de la escudería apuntó que «el nuevo formato no funcionó» y que deberían «pedir perdón a los aficionados».
Tan contundente como Marko estuvo Vettel: «Ya lo habíamos dicho antes, vamos en la dirección equivocada y los pilotos lo hemos evidenciado. Para la gente en las gradas no creo que sea un ejemplo. A final de la sesión no había ningún coche en pista, mientras que los aficionados quieren que luchemos hasta el límite, cuando se suponía que la pista estaba mejor».
Pese a lograr la pole, Hamilton, algo más prudente, también explicó su desagrado: «Hay que cambiarlo un poco más, en la dirección adecuada para que haya emoción hasta el último segundo».
Por último, Niki Lauda, consejero de Mercedes, anunció que todos los jefes de equipo van a pedir que la calificación cambie para el próximo Gran Premio porque «es un sistema totalmente equivocado».