Iron Ramos
El equipo por encima de todo. Bajo este lema se ha desarrollado la prolífica carrera deportiva de Sergio Ramos y así continuará hasta el día de su retirada. El central del Real Madrid sufrió una fractura de los huesos propios de la nariz en el derbi madrileño, tras recibir una patada –fortuita pero carente de la sanción merecida– de Lucas Hernández, pero este hecho no le hará perderse más encuentros que los estrictamente necesarios. Sergio ha decidido esquivar el quirófano para seguir ejerciendo de líder sobre el césped. Un líder de hierro.
Y es que Ramos no está dispuesto a dejar solo y desamparado al equipo que capitanea, en un momento tan delicado como el que se vive en el Santiago Bernabéu. A diez puntos del Barcelona en la clasificación liguera y con el pase a los octavos de final de la Champions aún por cerrar, el ‘4’ madridista sabe que este no es tiempo de ausentarse de los terrenos de juego, y por ello ha tomado la decisión de no operarse por el momento y ponerse de nuevo a las órdenes de Zinedine Zidane, tan pronto como los médicos del club le permitan.
El historial de lesiones de Ramos no es el mayor dentro de la plantilla del Real Madrid, y eso que a lo largo de los años ha sufrido golpes y más golpes, como consecuencia de la fricción necesaria a llevar a cabo en cada encuentro. Sergio es un jugador físico y en más de una ocasión esto le ha pasado factura, pero para derribarle se necesita algo más que una simple lesión, sobre todo si hablamos de momentos importantes de una campaña.
Sufrir una fractura en la nariz no resulta algo novedoso para el camero, que ya tuvo que lidiar con el dolor en la zona en 2007, cuando era prácticamente un recién llegado al Real Madrid. En un duelo de Champions frente al Bayern Munich, Ramos recibió un golpe de Roy Makaay que le produjo una rotura del tabique nasal con obstrucción respiratoria, un diagnóstico que anima a pasar por el quirófano. Sergio, sin embargo, esperó hasta final de temporada para realizar la intervención, a pesar de las dificultades personales que pudiera sufrir hasta el 21 de junio de aquel año, día en el que se realizó la operación.
Además de la nariz, la otra parte del cuerpo medianamente vulnerable del hombre de hierro del Real Madrid son los hombros. Sergio ha sufrido lesiones en ambas articulaciones, pero tanto en 2013 como en 2015 decidió ocultar la lesión con sendas infiltraciones que le permitieron seguir jugando en momentos, de nuevo, de importancia notable para la entidad. Sin ser amigo de lucir la capa de superhéroe, resultaría injusto no atribuir a Ramos esta condición, por su talento y por sus goles en el último momento, pero sobre todo por su compromiso.