Emociona verlo: el conmovedor abrazo de Carlos Sainz con su hijo tras ganar su cuarto Dakar
Carlos Sainz padre e hijo se fundieron en un fuerte abrazo nada más cruzar la meta y ganar su cuarto Dakar
El piloto de Ferrari era uno de los que esperaba a su padre a su llegada
Carlos Sainz se fundió en un emotivo abrazo junto a su hijo Carlos tras proclamarse campeón del Dakar 2024. El piloto de Audi cumplió con el objetivo de llevar el coche a la meta para conseguir su cuarto Touraeg. En la meta le esperaba Carlos Sainz Jr, que viajó hasta Arabia Saudí para estar junto a su padre en este día tan especial.
El de Ferrari le estaba esperando en la meta y cuando llegó el de Audi, Sainz hijo le cogió en brazos y se dieron un fuerte abrazo que emociona solo con verlo. A diferencia del año pasado, esta vez Carlos no había podido ir a Arabia Saudí para apoyar a su padre puesto que esta edición ha empezado más tarde que la anterior y él se encontraba inmerso en la pretemporada para preparar el inicio del curso en la F1, que arranca el 2 de marzo en Bahrain.
El año pasado sí que estuvo en un par de etapas e incluso se hizo viral una imagen del joven piloto de Fórmula 1 indicando a su padre uno de los puntos críticos de la etapa. Tras unos días en el desierto de Arabia Saudí junto al Matador, Sainz tuvo que marcharse para comenzar a preparar la temporada de F1. Es por eso que en esta edición no ha podido estar presente como otros años.
Pero el madrileño no se quería perder este momento histórico y cogió un avión rumbo a Arabia Saudí para acompañar al cabeza de familia en su gran día. Carlos Sainz y Lucas Cruz hicieron su entrada triunfal en Yanbu como campeones del Dakar 2024, y allí le esperaba su hijo Carlos para felicitarle y darle la enhorabuena por su cuarto Touareg. A sus 61 años, el español ha batido su propio récord de ganador más veterano de la historia del rally más duro del mundo.
Sainz, recibido a lo grande
Uno de los que esperaban impacientes la llegada del Matador era su hijo Carlos Sainz, que es el fan número uno de su padre. El joven piloto ha vivido esta edición desde la distancia con un manojo de nervios, ya que el de Audi ha liderado la prueba durante gran parte de la misma y cada día en el Dakar puede pasar de todo.
A su llegada a la meta, el cuatro veces ganador del Touareg se bajó ipso facto del vehículo al ver a su hijo y se fundió en un fuerte abrazo con él. Han sido días de mucho sufrimiento, en especial en la etapa 10 cuando tuvo tres pinchazos y casi pierde todas sus opciones. Por suerte estaba Ekström cerca para echarle una mano y cederle sus ruedas para que pudiera continuar sin problemas.
Este viernes, por fin, el madrileño ha podido soltar todos esos nervios tras cruzar la línea de meta y ver que ya era campeón. A pesar de perder algo más de cinco minutos con De Mevius no importaba puesto que El Matador era el nuevo campeón del Dakar 2024 a sus 61 años con 1:20 horas de ventaja sobre el segundo. Para colmo, Sainz logró ganar con un coche en el que casi nadie confiaba cuando se embarcó en este proyecto.
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