Eliminados con la cabeza alta (1-1)
El Atlético salió con todo en Stamford Bridge pero no pudo pasar del empate a uno y se ha despedido de la Champions. La victoria de la Roma tampoco ayudó, aunque los rojiblancos se marchan con la cabeza alta. Desde el pitido inicial quedó clara la estrategia del Cholo, presión para ahogar al Chelsea y directos al ataque. No había tiempo para tanteos, necesitaban marcar cuanto antes para evitar sustos. Filipe y Giménez eran los laterales pero parecía que fueran interiores, subían constantemente. Torres dio el primer aviso al poco de empezar, pero a la contra los locales eran muy peligrosos.
Empezaron muy bien, sin embargo, los ingleses supieron contrarrestar a la perfección. El riesgo de salir al ataque era máximo y el Cholo lo sabía. Al contraataque los de Conte tenían mucho peligro. Morata asustó al Atleti con dos disparos muy peligrosos. El primero se marchó fuera por poco y el segundo lo detuvo Oblak. A partir de ahí se estiraron y comenzaron a poner en apuros a los rojiblancos.
Con el paso de los minutos el Chelsea se encontraba más cómodo en el campo. Habían encontrado el resquicio en la zaga colchonera. Los dos centrales, Lucas y Savic, estaban muy firmes y seguros, pero las subidas de los laterales dejaban huecos atrás que aprovecharon los londinenses para acercarse con peligro a la meta del esloveno. Hazard era una pesadilla, generaba muchos dolores de cabeza a la defensa del Atleti que estaba sufriendo bastante.
Zappacosta tuvo la mejor ocasión para el Chelsea en el primer tiempo pero se topó con un Oblak colosal. El esloveno demostró una vez más por qué es uno de los mejores porteros del mundo. Sacó una mano providencial para evitar que el disparo del italiano se colara dentro. Los espacios que dejaba el Atleti atrás eran su talón de aquiles. Los de Conte los aprovecharon para ponerles en apuros, pero el meta se convirtió en el héroe y mantuvo con vida a los suyos al descanso.
En la reanudación calentaban varios jugadores. Simeone tenía claro que debía mover el banquillo, aunque no quiso hacerlo de manera inmediata. Griezmann tuvo la primera por medio de una falta y posteriormente el Chelsea dio dos avisos, uno de ellos detenido por Oblak. Los ingleses seguían apretando y cada vez más. Sin duda la mejor oportunidad del Atleti la tuvo Filipe. El brasileño recogió un rechace tras disparo de Koke, pero su golpeo se estrelló en el palo y el posterior cabezazo de Koke lo detuvo Courtois.
Saúl hace soñar
Instantes después llegaba la mala noticia desde Roma. Perotti adelantaba a los italianos. Entonces apareció el de siempre, el salvador, don Saúl Ñíguez, para adelantar al Atleti. El gol llegó al más puro estilo Atlético, a balón parado. Koke puso el córner al primer palo donde la peina Torres y el 8 rojiblanco remató en el segundo completamente solo e hizo el primero.
Los del Cholo Simeone mejoraron a raíz del tanto. El Chelsea necesitaba ganar para ser primero de grupo, por lo que tenía que ir a por el partido, ya que la Roma ganaba al Qarabag. Los papeles habían cambiado, ahora era el Atlético quien salía con peligro a la contra. Con el paso de los minutos los de Conte se tenían que ensanchar buscando darle la vuelta al choque y los rojiblancos esperaban encontrar más espacios.
Hazard mata al Atleti
Sin embargo, el cuadro local seguía llegando con peligro hacia la portería de Oblak. Christensen perdonó el 1-1 a la salida de un córner. Falló un cabezazo a puerta vacía. Y posteriormente apareció la cabeza de Giménez sobre la línea para salvar el gol del Chelsea. Estaban apretando cada vez más y al final llegó el gol. Con el Atlético encerrado en su área Hazard hizo el empate. Su disparo se metió en la portería tras desviarla Savic.
La diana del conjunto británico dejó grogui al Atleti que en la siguiente jugada estuvo a punto de recibir el 2-1. Pero entonces volvió a aparecer Oblak para salvar el gol en un mano a mano con Morata. Tras el gol, Simeone movió el banquillo en busca de la victoria. Sacó a Vietto y quitó a Giménez. No le quedaba otra, el Atleti tenía que ir al ataque.
A ninguno de los dos les valía el empate. El Chelsea necesitaba un gol para ser primero, mientras a los rojiblancos solo les valía la victoria y esperar una ayuda del Qarabag que no se estaba produciendo. Ambos lo intentaron, aunque fueron los locales quienes gozaron de las mejores oportunidades en los instantes finales del partido. Pero el 1-1 no se movió y el Atleti se ha quedado fuera de la Champions. Dicen adiós con la cabeza alta. Los dos empates ante el Qarabag han sido decisivos.