El CTA reconoce la existencia de una sala VAR paralela… para árbitros reserva
El CTA reconoce que existe una sala VAR paralela para árbitros reserva pero señalan que prácticamente no hay interacción entre ellas
Señalan que la Liga está al corriente desde su creación y que su uso es también "habitual" en competiciones FIFA y UEFA
El Comité Técnico de Árbitros (CTA) ha emitido un comunicado para aclarar la existencia de la Sala VAR secreta revelada por el ex colegiado Estrada Fernández. Desde el organismo arbitral reconocen la existencia de dos salas anexas a las cinco que se utilizan específicamente para el uso del videoarbitraje. Destacan que en una de ellas se encuentran los técnicos del proveedor del VAR, Hawk-Eye, y que en la otra hay un árbitro reserva por si tuviera que sustituir o al árbitro de VAR o a su asistente (AVAR).
Desde el CTA han asegurado que las funciones de este árbitro que se encuentra en la sala VAR anexa son «realizar un seguimiento del partido» y «estar preparado para sustituir al VAR o AVAR en caso de problema médico». Añaden que la comunicación entre ambas salas es inexistente, salvo en una excepción, la de informar «que las líneas de fuera de juego enviadas a la producción televisiva no han sido mostradas» ya que son los únicos que pueden decidir si se incorporan a la retransmisión o no.
Han señalado que su uso es «habitual» en competiciones FIFA y UEFA, aunque la International Board (IFAB) no habla en ningún momento de salas anexas de VAR con capacidad de interacción con las personas presentes en la Sala VOR que sí reconoce el CTA. También que «la Liga tiene conocimiento de estos espacios desde el mismo momento de su creación» y que el miembro designado por la patronal en el Comité Arbitral para la Competición Profesional los ha visitado en diversas ocasiones.
El CTA desmiente a Estrada Fernández
Con el fin de desmentir categóricamente y aclarar alguna publicación reciente, queremos informar de que el espacio VOR de la Ciudad del Fútbol de Las Rozas de la Real Federación Española de Fútbol, que se ha mostrado en multitud de ocasiones tanto a los clubes profesionales como a los medios de comunicación en un ejercicio de absoluta transparencia, consiste en siete salas VAR cerradas, un espacio con cinco estaciones VAR y dos salas adicionales.
En la primera sala adicional, los técnicos del proveedor tecnológico Hawk-Eye se encargan de la gestión técnica de los partidos (preparación de los encuentros con la producción televisiva, gestión del software, control de los servidores, etc.).
En la segunda, denominada Sala de VAR reservas, se sitúa un árbitro VAR extra para cada uno de los partidos, cuyas funciones son realizar el seguimiento del partido y estar preparado para sustituir al VAR o AVAR en el caso de que hubiera un problema médico.
Esta persona facilita a la Comisión Técnica del CTA información inmediata de cualquier problema técnico que hubiera en los partidos o de incidentes extraordinarios (problemas meteorológicos, percances de público, etc.), pero NUNCA interaccionan con el VAR o AVAR del partido salvo, como excepción, para comunicarles que las líneas del fuera de juego enviadas a la producción televisiva no han sido mostradas en el programa, puesto que es ésta la que decide si quiere o no incorporarlas a su retransmisión.
La Liga tiene conocimiento de estos espacios desde el mismo momento de su creación. Es más, tanto el actual miembro designado por La Liga en el Comité Arbitral para la Competición Profesional, Arturo Daudén Ibáñez, como su predecesor, Antonio Jesús López Nieto, han visitado en reiteradas ocasiones estas salas y conocen perfectamente el uso que se hace de ellas.
Es también pertinente recordar que la existencia y uso de estas salas adicionales es habitual en competiciones internacionales de FIFA y UEFA, así como en las principales ligas europeas.
Finalmente, el CTA quiere recordar que las imágenes y los audios que se genera en la sala VOR durante el partido quedan registrados.
Lamentamos que, sin fundamento alguno y con el único objetivo de levantar sospechas interesadas, se ponga en tela de juicio el comportamiento profesional e independiente del CTA y de los miembros que forman parte de este.
Los servicios jurídicos de la Real Federación Española de Fútbol ya estudian cualquier declaración o acusación que atente contra la integridad de la competición.