Chimy Ávila sobre sus compañeros de infancia: «El que hoy no está privado de su libertad está en un cementerio»
Chimy Ávila, delantero de Osasuna, ha confesado en una entrevista que ha hecho el mal en el pasado pero que Dios ya le ha perdonado.
El delantero de Osasuna ha desvelado en una entrevista que ha hecho el mal en su vida pero que siente que Dios le ha perdonado a él. Por ese motivo, según ha desvelado, cuando aconseja a un chico le aconseja que se gane la vida honestamente, que no hay nada más lindo que apoyar la cabeza en la almohada y dormir sin deberle nada a nadie.
“He cometido errores en mi vida. He hecho muchas veces el mal. Me acuerdo de mis compañeros de la infancia. El que hoy no está privado de su libertad está en un cementerio”, es una de las declaraciones del delantero argentino en el Informe Robinson que verá la luz este jueves.
En una entrevista íntima, Chimi Álvila ha añadido: “Me he llegado a decir a mí mismo: ‘Qué cerca estuve de ser yo el que estaba en ese cajón’. Yo le pedía de rodillas a Dios que me perdone y siento que Dios me perdonó a mí”.
Chimy Ávila fue tentado por la delincuencia cuando su hija enfermó y no tenía dinero
El futbolista de 25 años relataba recientemente sus duros inicios en el mundo del fútbol, algo de lo que nos hicimos eco en OKDIARIO. “Estuve desde los 18 hasta los 20 años sin jugar al fútbol. Fui padre y mi hija enfermó sin tener yo dinero. Llegó un momento en el que no podíamos mantenerla y estuvo internada en una clínica sin seguro social, y había que pagar. Estuvo al borde de morir”, comenzaba diciendo.
“En aquella época no jugué pero los ‘Futbolistas Agremiados de Argentina’ se portaron muy bien conmigo y me mantuvieron la obra social”, agregaba un Chimy Ávila que por aquella época trabaja de albañil. “Mi hija estaba internada en un clínica muy enferma y yo hacía cada día 30 kilómetros en bicicleta para llevarle el billete de autobús a mi mujer y tomar un café”, proseguía.
Chimi Ávila aprovechaba la ocasión para mostrar su agradecimiento a su agente, que pagó la clínica de su hija, y a San Lorenzo: “A San Lorenzo le debo mucho porque me dio la oportunidad de regresar al fútbol cuando yo estaba a punto de tirar por la opción fácil en un barrio de mucha delincuencia y mala vida”.