Brasil vuelve a llamar a Guardiola a la desesperada
Eduardo Inda avanzó en 'El Chiringuito' que la CBF ha vuelto a contactar con Pep Guardiola para que dirija a la selección de Brasil
El técnico acaba contrato con el Manchester City en junio y aún no tiene claro su futuro
La Confederación Brasileña de Fútbol, que ya negoció con Pep Guardiola tras el fiasco del Mundial de Qatar, ha vuelto a llamar al entrenador del Manchester City para que entrene a la selección de Brasil, que está sumida en una enorme crisis deportiva.
Así lo reveló Eduardo Inda en El Chiringuito de Jugones. «La Confederación Brasileña de Fútbol está prácticamente sin entrenador y están buscando uno. El año pasado querían a Ancelotti y antes querían a Guardiola. Me dicen que han vuelto a tocar a Josep Guardiola. Guardiola les ha emplazado al mes de enero porque el City tiene un problema con el fair play financiero y tiene un juicio con la Premier y puede ser sancionado con puntos, descenso o una sanción económica ejemplar. A lo mejor no seguiría la próxima temporada. Termina contrato con el City el 30 de junio», aseguró el director de OKDIARIO en el programa de Pedrerol.
Pep Guardiola no tiene claro si seguirá en el Etihad cuando termine la presente temporada. Su contrato acaba en junio de 2025 y después de ocho temporadas al frente del Manchester City podría dar por finalizada su etapa en la Premier después de haber conquistado todos los títulos con el club citizen, incluida la ansiada Champions.
El entrenador español ha emplazado a los dirigentes de la CBF a volver a hablar en enero para darles una respuesta definitiva a su oferta. A Guardiola le tienta entrenar a una selección, y más aún a la pentacampeona del mundo, pero Pep quiere disipar las dudas sobre su futuro antes de tomar una decisión que marcará la siguiente etapa de su carrera en los banquillos.
Guardiola deshoja su futuro
Después de haber dirigido al Barcelona, al Bayern de Múnich y al Manchester City y de haberse convertido en uno de los entrenadores más laureados de la historia, si no el que más, Guardiola siente que su etapa como entrenador de élite a nivel de clubes está cerca de terminar pero no quiere colgar el chándal sin dirigir antes a una gran selección.
El nombre de Pep Guardiola se ha vinculado no sólo con la selección de Brasil, sino también con la de Inglaterra, un país que le acogió desde su llegada con los brazos abiertos. El ex técnico del Barcelona se encuentra en un punto de su carrera en el que necesita no sólo apartarse un poco del partido a partido, sino también un nuevo desafío y no hay muchos mayores que ganar un Mundial con Brasil.
Es cierto que la verdeamarela pasa por un momento delicadísimo con cuatro derrotas en los últimos cinco partidos de las eliminatorias sudamericanas de clasificación para el Mundial 2026. Esta Brasil parece una selección poco o nada reconocible, sin un patrón de juego definido, endeble atrás y sin pólvora arriba. Jugadores con Vinicius y Rodrygo no han terminado de dar el paso, Endrick está aún demasiado verde y la canarinha sigue echando en falta a Neymar.
Cuando acabó el Mundial de Qatar, la CBF tenía claro que la selección necesitaba un entrenador extranjero. Ednaldo Rodrigues, su polémico presidente, llegó a un pacto con Carlo Ancelotti. Si el Real Madrid le despedía o no le ofrecía la renovación, Carletto se haría cargo de Brasil. Fue la temporada en la que el equipo blanco perdió la Liga con el Barça de Xavi y cayó en Champions goleado precisamente ante el City de Guardiola. Pero Ancelotti resistió la tempestad y siguió en el banquillo del Bernabéu.
El baile de Brasil
El presidente de la CBF llegó a asegurar que Ancelotti sería el seleccionador de Brasil en la Copa América de 2024. Mentía. El Real Madrid ofreció la renovación a Carletto mediada la temporada pasada para zanjar rumores. Después llegaron otra Liga y otra Champions, así que el futuro de Ancelotti sigue pintando en blanco. La CBF dio el mando de la canarinha a Dorival Júnior, el enésimo entrenador brasileño.
Sus resultados no han podido ser peores. Eliminado en octavos de la Copa América y con la clasificación para el Mundial de 2026 en riesgo (que no en peligro) tras cuatro derrotas en los últimos cinco partidos. Por eso desde la CBF se tiene claro que la selección necesita un golpe de timón. Lo primero es asegurar la clasificación, después vendrá el relevo en el banquillo porque Brasil no puede permitirse seguir arrastrando la imagen de la pentacampeona del mundo en un país en el que el fútbol les una religión.
Si Guardiola quiere, será el próximo seleccionador de Brasil. Si Pep rechaza a la CBF, correrá el turno y volverá a abrirse el abanico de nombres de entrenadores extranjeros. La lista no es demasiado larga pero la necesidad y la exigencia de la canarinha son máximas.