Puig gastará 3,5 millones en un chiringuito para el cambio climático con 24 empleados

El Gobierno Valenciano que preside el socialista Ximo Puig llevará al pleno de las Cortes Valencianas del próximo día 22 del presente mes de febrero -el último de la legislatura, en principio- una ley de sólo 12 artículos para crear la Agencia del Cambio Climático, cuyas labores ya asume actualmente una dirección general. De facto, se trata de un nuevo chiringuito, que tendrá un presupuesto de 3,5 millones de euros y contará con 24 empleados para los que sólo este año se prevé un gasto superior a los 881.000 euros en salarios, según refleja la propia memoria económica del anteproyecto de la citada ley. 

Se da la circunstancia de que el gasto del sector público valenciano casi se ha duplicado desde que el socialista Ximo Puig es presidente del Gobierno valenciano. Pues ha pasado de los 2.038 millones de euros en el último año de gobierno del PP (2015) a los más de 3.700 millones actuales, que ya marcaron un máximo histórico en el pasado 2022. El incremento anual ha superado la media de los 239 millones de euros.

Desde 2015, también, los gobiernos de Ximo Puig han creado cuatro organismos autónomos, seis entidades, una fundación, un consorcio y otras dos entidades adicionales. Todo ello, tiene un coste anual para los valencianos de 443 millones de euros.

Presupuesto de 3,5 millones 

Ahora, a ese capital se suman otros 3,5 millones de euros, que es el coste que tendrá la Agencia del Cambio Climático, según explica la memoria económica de la citada ley, que acaba de ser objeto de comisión para votar las enmiendas parciales.

En ese marco, el Partido Popular ha presentado una modificación al artículo 1, que de haber sido aprobado hubiera supuesto la supresión de esa agencia de cambio climático antes incluso de su nacimiento, pero que ha sido votado en contra por los socialistas de Ximo Puig, Compromís y Podemos.

La creación de este nuevo chiringuito, tal como lo ha denominado la oposición, responde a una iniciativa de Podemos la pasada legislatura, que se pospuso, y es ahora uno de los acuerdos que sirvieron para constituir el actual Ejecutivo de Ximo Puig, lo que los valencianos llaman el Botánico, por el lugar donde se rubricó ese pacto.

Inicialmente, la Agencia formaba parte de la Ley Forestal y del Cambio Climático, según han confirmado fuentes parlamentarias. Pero fue retirado de la misma porque algunos informes del propio Gobierno valenciano desaconsejaban su inclusión. Por ello, de modo transitorio, el Gobierno de Ximo Puig incluyó el desarrollo de sus funciones en una dirección general.

Ahora, el Gobierno valenciano quiere transformar esa dirección general en una agencia a través de una ley de sólo 12 artículos que se votará en el pleno del día 22. El último de la legislatura si finalmente Puig y su Gobierno no incluyen otro, ya conocido como pleno escoba, para aprobar algún acuerdo de última hora.

Sueldos y puestos de trabajo

La Agencia contará, según consta en la memoria económica a la que ha tenido acceso OKDIARIO, con un director, cuya previsión salarial es de 60.110,42 euros anuales. Además, tendrá una secretaria o secretario general técnico y una subdirección general de Coordinación de Programas, a razón de 55.086,26 € cada uno. A continuación, aparecen cinco jefes de servicio, que percibirán, según esa memoria 52.965 euros.

Ya en una escala salarial distinta, se prevé siete técnicos, con un salario de 37.570,95 euros para cada uno de ellos. También, contará con dos jefes de equipo, a razón de 27.104,35 euros y dos jefes de negociado, que percibirán 24.264,39 euros. Hay dos puestos de secretariado de dirección, a razón de 25.344,43 euros. Y, finalmente, tres administrativos que cobrarán 22.501,69 euros cada uno. En total, 881.468,99 euros, según reza la citada memoria sólo para el capítulo de personal. Otro capítulo, para el que existe una previsión de dos millones de euros, estará destinado a subvencionar proyectos de entidades que contribuyan a la lucha contra el cambio climático.

La citada agencia, según fuentes de la citada comisión, está financiada, en parte por los impuestos que su vez se crearon con la Ley de Cambio Climático y Transición Ecológica. La diputada popular Elisa Díaz ha recordado a este respecto que su formación ya se negó a crear esos impuestos: «Son más impuestos para crear más chiringuitos. Y este es el resultado», ha sentenciado Elisa Díaz.