Sánchez deja fuera de su visita a los refugiados de Alicante al alcalde como hizo con Ayuso en Pozuelo
El presidente del Gobierno de España el socialista Pedro Sánchez y el de la Generalitat Valenciana el también socialista Ximo Puig se han dejado fuera de su visita al centro de refugiados de Alicante al alcalde de la ciudad, el popular Luis Barcala. No lo han invitado. Hay un antecedente a esta falta de cortesía institucional. El pasado día 10 cuando Sánchez visitó otro centro de refugiados, el de Pozuelo, tampoco invitó a la presidenta de la Comunidad de Madrid Isabel Díaz Ayuso. Tanto Ayuso como Barcala militan en el Partido Popular.
Sorpresa y estupefacción. Esos fueron los 2 adjetivos con que fuentes oficiales del Ayuntamiento de Alicante calificaron la «falta de cortesía institucional» del presidente del Gobierno de España el socialista Pedro Sánchez en su visita al centro de refugiados de Alicante a la que el alcalde de la ciudad Luis Barcala no ha sido invitado: ni por parte de Moncloa ni por parte de Ximo Puig «se ha recibido invitación», han sostenido las mismas fuentes.
Lo que debía ser un acto en que primaran conceptos como la solidaridad hacia el pueblo ucraniano y el apoyo a los miles de refugiados que han tenido que abandonar hogares y país a causa de la invasión rusa para evitar la muerte ha hecho que emergiera la batalla política cotidiana: el alcalde de la ciudad que alberga ese centro, Alicante, no ha sido invitado a una visita hecha a medida para que Sánchez fuera protagonista principal y que tuvo como primer actor invitado a Ximo Puig. Pero no así al alcalde de la ciudad visitada por Sánchez, Alicante. La invitación al alcalde de la ciudad donde se celebra el acto y su prevalencia en el orden protocolario está respaldada por los manuales de protocolo, donde se resalta que debe ser ese alcalde quien ocupe lugar principal junto al presidente del Gobierno.
Se da la circunstancia de que hace apenas 24 horas, Barcala recibió el encargo del Partido Popular de ser el secretario del Congreso del Partido Popular que situará al gallego Alberto Núñez Feijóo como nuevo presidente de la formación. Y se da la circunstancia, también, de que Barcala no acostumbra a marcharse de los actos sin mantener un encuentro con preguntas abiertas desde los medios. Hoy, Sánchez, por el contrario, ha despachado un recorrido de más de una hora con una declaración sin preguntas y con el solo preámbulo de apenas 2 minutos por parte de Puig.
En el Ayuntamiento de Alicante hay «asombro y estupefacción», tal como han reconocido fuentes oficiales del Consistorio por esa falta de cortesía institucional, que no es la primera vez que se produce. El pasado día 10 del presente mes de marzo, Sánchez visitó otro centro de refugiados, el de Pozuelo, en la Comunidad de Madrid, que preside la popular Isabel Díaz Ayuso. Tampoco, fue invitado el Ejecutivo madrileño entonces ni ahora lo ha sido el alcalde de Alicante. Tanto Ayuso como Barcala militan en el Partido Popular.