Descubren nueva molécula con potencial terapéutico

Un equipo de investigadores de la Universidad de Coimbra, Portugal, ha identificado una proteína que podría revolucionar los tratamientos contra el miedo y la ansiedad. Se trata de la molécula TrkC, la cual tiene propiedades extraordinarias para abordar esos trastornos.

Esta molécula desempeña un papel muy relevante en la modulación de las memorias relacionadas con la extinción del miedo en la amígdala cerebral. Esta es el área del cerebro responsable de las respuestas emocionales.

El descubrimiento de la función de TrkC tiene grandes implicaciones en el campo de la neurociencia. Así mismo, abre nuevas posibilidades para el tratamiento de trastornos donde el miedo está desregulado, como la ansiedad y el estrés postraumático.

La molécula TrkC

En su estudio, el equipo de investigación utilizó un modelo conductual para analizar el proceso de extinción del miedo. Durante esta investigación, observaron un aumento en la activación de la proteína TrkC en la amígdala, la región del cerebro que regula la respuesta al miedo, en la fase de formación de recuerdos de extinción del miedo.

Este incremento de TrkC está vinculado a una mayor plasticidad sináptica. Esto es, en la capacidad de las neuronas para modificar la forma en que se comunican, en respuesta a estímulos específicos.

El hallazgo fue publicado en la revista Molecular Psychiatry. Investigaciones anteriores ya habían sugerido una relación entre la proteína TrkC y patologías de ansiedad, tanto en humanos como en ratones con trastorno de pánico.

Sin embargo, debido a la complejidad de esas enfermedades, influenciadas por factores genéticos y ambientales, no se había logrado establecer una conexión clara. En pruebas posteriores con ratones sin patologías, se observó que la activación de TrkC extinguía el miedo.

Una gran esperanza

La proteína TrkC ha demostrado ser esencial en la normalización de las respuestas al miedo, especialmente en casos donde estas reacciones están alteradas. Por ejemplo, una persona que ha desarrollado miedo a los perros tras ser mordida puede crear nuevas memorias y respuestas gracias a la acción de esta molécula, mediante la exposición controlada a otros perros no agresivos.

La extinción del miedo no es simplemente olvidar, sino que implica un aprendizaje activo. Así lo aseguró Mónica Santos, autora principal del estudio y miembro del Centro de Innovación en Biomedicina y Biotecnología de la UC.

El próximo paso del equipo de investigación es desarrollar un medicamento que active la proteína TrkC. El papel del medicamento sería el de incrementar la plasticidad neuronal y mejorar las respuestas terapéuticas en humanos.

Según Santos, los tratamientos actuales para la ansiedad y la depresión no son completamente efectivos. Por ello, combinar este nuevo tratamiento con las terapias de exposición existentes podría aumentar su eficacia.

Trastornos relacionados con el miedo

Los trastornos de ansiedad incluyen condiciones como el trastorno de pánico, diversas fobias y el trastorno de estrés postraumático. Todas estas condiciones afectan gravemente la vida profesional y social de quienes los padecen, generando un impacto significativo tanto en los individuos como en la sociedad.

Estas patologías se caracterizan por un miedo exagerado o inapropiado, acompañado por una dificultad para extinguir dicho miedo. Los trastornos de ansiedad son tratados comúnmente con terapias de exposición y medicamentos como ansiolíticos y antidepresivos. Estas terapias buscan reducir el miedo mediante un proceso conocido como extinción del miedo.

Sin embargo, estos tratamientos no siempre tienen el efecto deseado. Por eso, es prioritario mejorar las opciones terapéuticas disponibles. El descubrimiento de la UC es significativo porque apunta a la posibilidad de desarrollar tratamientos que no solo aborden los síntomas, sino que también promuevan la extinción de los recuerdos asociados con el miedo.

La investigación ha señalado que la vía TrkC podría ser una diana terapéutica prometedora para quienes padecen trastornos relacionados con el miedo. Según la líder del estudio, se espera que combinar terapias de exposición con medicamentos potencie la plasticidad sináptica, actuando sobre la vía TrkC. Esto ofrecería un enfoque más eficaz y duradero para tratar la ansiedad.

Tipos de moléculas para tratamientos

1. Moléculas orgánicas: las moléculas orgánicas son compuestos químicos que contienen carbono en su estructura molecular. Estas moléculas son la base de muchos medicamentos. Los fármacos más comunes, como los analgésicos, los antibióticos y los antiinflamatorios, están constituidos por moléculas orgánicas que actúan sobre el organismo para aliviar síntomas o combatir infecciones.
2. Moléculas inorgánicas: aunque son menos comunes en la industria farmacéutica, las moléculas inorgánicas también juegan un papel importante en el desarrollo de tratamientos médicos. Compuestos como el óxido nítrico y el sulfato de magnesio se utilizan en el tratamiento de enfermedades como la hipertensión arterial y la preeclampsia.
3. Moléculas biológicas: las moléculas biológicas son compuestos derivados de organismos vivos, como proteínas, enzimas y ácidos nucleicos. Estas moléculas son fundamentales en el desarrollo de terapias avanzadas, como la terapia génica y la terapia celular, que buscan corregir enfermedades a nivel molecular. Ejemplos de moléculas biológicas incluyen la insulina recombinante, utilizada en el tratamiento de la diabetes.
4. Moléculas sintéticas: las moléculas sintéticas son compuestos químicos diseñados en laboratorio para cumplir una función específica en el tratamiento de enfermedades. Ejemplos de moléculas sintéticas incluyen los anestésicos locales, los antidepresivos y los anticoagulantes, que se utilizan en el tratamiento de una amplia variedad de enfermedades y trastornos.

Gracias a la continua investigación y desarrollo en este campo, es posible seguir avanzando en el descubrimiento de nuevas moléculas para el tratamiento de enfermedades y la mejora de la calidad de vida de las personas.

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