Películas clásicas infantiles para ver con los niños (III)
La mejor manera que tienen los niños de aprender es divirtiéndose. Por eso, los padres deben hacer uso de herramientas que permitan que sus hijos puedan hacer las dos cosas al mismo tiempo. Y entre las mismas se encuentra el cine, que es estupendo para pasar todos juntos un momento muy entretenido, para reírse y también para asimilar valores.
Cualquier domingo en casa es apropiado para que la familia se siente en el sofá y disfrute de una película. ¿Cuál? Hay muchas opciones, no obstante, desde BabyAffinity recomendamos que se opte por clásicos infantiles. Muchos de estos, como “La bruja novata” o “Big”, ya los hemos ido dando a conocer en artículos anteriores y ahora queremos seguir ampliando la lista con estas otras propuestas:
“E.T, el extraterrestre” (1982)
Uno de los largometrajes considerados piezas fundamentales de la historia del cine es este, estrenado en el año 1982 de la mano del gran director Steven Spielberg, pues algunas de sus escenas forman ya parte de nuestro acervo cultural.
Cuenta la historia de un niño, Elliott, que descubre a un extraterrestre, E.T, que se ha quedado solo en la Tierra. El pequeño no duda en llevárselo a casa y así será cómo dará inicio una relación de amistad entre ambos, que irá creciendo más y más y que intentará salvar todos los obstáculos que aparecen en el camino así como las diferencias que les separan.
Divertida y emotiva es la película que consigue que los pequeños espectadores puedan aprender valores tan importantes como la amistad, la tolerancia, el respeto a los demás e incluso la solidaridad.
“Los Goonies” (1985)
Hablar de películas clásicas infantiles es hacer referencia, sin lugar a dudas, a esta otra, que fue dirigida por Richard Donner y que está basada en una historia creada por el ya mencionado Steven Spielberg.
Una pandilla de amigos, de lo más variopinta, es la protagonista de este relato de aventuras, que da inicio cuando, con el propósito de intentar encontrar un tesoro que salve a su barrio del desahucio, los menores entran en un laberinto. Un antiguo pirata es el que dio forma a este, en el que deberán ir sorteando un sinfín de pruebas y de peligros con tal de llegar al oro que guardó.
Pero no estarán solos en esa búsqueda, pues tendrán pisándoles los talones a una familia de mafiosos que pretende alcanzar antes que los adolescentes el citado tesoro.
Tanto los mayores como los niños que ven este filme disfrutan enormemente con situaciones llenas de acción, con misterio y con grandes dosis de humor. No obstante, además de eso, ver “Los Goonies” es una manera de transmitir a los pequeños la importancia de luchar por los objetivos, el valor de la amistad y del amor de la familia, la necesidad de respetar la diversidad…
“La maldición de las brujas” (1990)
Otro de los clásicos infantiles que merece la pena que padres e hijos vean juntos es este, que gira en torno al mundo de la magia y la fantasía. Nicolas Roeg fue quien dirigió el largometraje, protagonizado por Jasen Fisher, Mai Zetterling y Anjelica Huston.
Cuenta la historia de un niño que, tras quedarse huérfano, se marcha a vivir con su abuela. Esta le dará todo el cariño que necesita y, además, le dará cuenta de una serie de secretos, entre otros, la existencia real de brujas. Algo que muy pronto el menor comprobará y que le llevará a verse envuelto en una complicada serie de aventuras donde se enfrentará a la bruja más peligrosa, Eva Hernst.
Además de conseguir que los pequeños desarrollen su imaginación y creatividad y que disfruten de una historia que es entretenimiento a raudales, viendo el largometraje se logra que aprendan no sólo a que hay que esforzarse para conseguir los objetivos que se deseen, sino también que le den el valor que merecen a sus abuelos.
“Cuenta conmigo” (1986)
Otra de las películas infantiles consideradas ya clásicas y que seguramente que los padres recordarán de su infancia es esta, dirigida por Rob Reiner. Gira en torno a la figura de cuatro amigos de doce años, todos son muy diferentes y cuentan con vidas realmente complicadas, no obstante, encuentran la felicidad en la amistad que les une y en las aventuras que viven juntos.
Precisamente una de esas aventuras es la que les llevará a experimentar algo que les cambiará para siempre. Y es que cuando deciden encontrar a un niño que ha desaparecido, se toparán con una serie de situaciones complejas y peligrosas de las que sólo podrán salir a flote confiando unos en los otros.
El trabajo en equipo, el valor de la amistad, el respeto a los demás y la importancia de expresar los sentimientos son algunas de las enseñanzas que se aprenden viendo este largometraje.