Nace un bebé con el síndrome de la cara de plástico

La Naturaleza no deja de sorprendernos en muchas ocasiones y buena muestra de eso es el nacimiento de un bebé que ha tenido lugar estos pasados días. Se trata de un pequeño que ha venido a este mundo sufriendo lo que se conoce como síndrome de la cara de plástico.

¿Dónde ha sucedido?

En India, concretamente en la región de Amritsar, es donde se ha producido el nacimiento de un pequeña que tiene un extraño trastorno que responde al nombre de Ictiosis Laminar (IL), que es conocido comúnmente con la denominación de “cara de plástico”.

¿En qué consiste?

Este síndrome se identifica por el hecho de que quien lo sufre cuenta con una extraña dermatosis. Y es que todo su cuerpo se encuentra recubierto por una membrana muy gruesa, llamada membrana de colodión. En concreto esta, entre otras cosas, provoca que parezca tener una imagen de muñeca y además no hay que pasar por alto que incluso esa citada membrana le da una textura a la persona como si de celofán se tratase.

¿Qué le sucede a la niña?

Tras su alumbramiento, los médicos del hospital indio donde se ha atendido al mismo se encuentran bastante preocupados porque no saben si la pequeña conseguirá sobrevivir. Y es que la situación es complicada teniendo en cuenta que no sólo se pone a llorar cada vez que se le toca sino que además no es capaz de alimentarse del pecho materno y tiene el aspecto de una muñeca de goma prácticamente. Asimismo su imagen está marcada por unos labios y ojos rojos al tiempo que por una boca que se asemeja a la de un pez.

Singularidad del síndrome

Dentro de la categoría de síndromes raros se encuentra este, del que merece la pena conocer otros datos de interés:

• Es hereditario, ya que se transmite de padres a hijos. Eso sí, para que los pequeños lo sufran tanto el padre como la madre deben contar, como mínimo, con un gen anormal para que esa transmisión se produzca.

• Parece que, aproximadamente, a las dos semanas de vida del pequeño, la membrana anteriormente citada se cae. No obstante, lo curioso del asunto es que, debajo de esa, la piel no sólo es roja sino también escamosa. Es decir, que tiene una apariencia similar a la superficie de un pez.

• Es muy complejo el proceso de caída de la llamada membrana de colodión, llegándose incluso a poner la vida en peligro pues pueden tener lugar numerosas infecciones.

• Los niños que tienen este problema cuenta con el inconveniente de que no pueden cerrar los ojos por completo.

• Entre las muchas consecuencias que posee esta patología, si el individuo consigue sobrevivir, es que su calidad de vida está claramente mermada. Esto es debido no sólo a las limitaciones que por la misma posee sino, sobre todo, a su apariencia física que le “minará” su autoestima.

• Los estudios científicos llevados a cabo con respecto a este síndrome vienen a indicar que se produce un caso entre cada 600.000 nacimientos.