Isabella y Jacob, los bebés mejor vestidos del mundo

Muchos son los bebés que puntualmente se convierten en noticia y adquieren protagonismo en todo el planeta, gracias a que han nacido de manera singular o a un viral en el que hacen algo curioso. Pues bien, ahora los niños que están copando las portadas de los medios de comunicación son Isabella y Jacob, dos pequeños de Reino Unido que han recibido el “título” de los bebés mejor vestidos del mundo.

¿Quiénes son?

Isabella y Jacob son hermanos gemelos y tienen sólo 100 días de vida. Si han logrado ser protagonistas en redes sociales y publicaciones de diversa índole es gracias a cómo van vestidos siempre. Y es que sus padres, unos adictos a la moda, no dudan en “quemar” cantidades ingentes de dinero para que vayan a la última. Así, su madre (Louis) calcula que se ha podido gastar unos 20.000 euros hasta el momento y todo para que nunca repitan modelito.

Siempre a la última

Estos pequeños británicos dieron el salto a la fama en el momento que su mamá decidió usar Internet, y concretamente la red social Instagram, para ir mostrando al mundo cómo van vestidos en el día a día. Como hemos mencionado anteriormente, nunca han repetido modelo hasta el momento y todo parece que va encaminado a que sigan sin hacerlo:

• Cada uno de los trajes que han llegado a vestir ha alcanzado precios de hasta 500 euros.

• Las mejores firmas de moda del mundo son a las que recurren los padres de Isabella y Jacob para vestirles. Así, se les ha podido ver con prendas de Prada, Christian Dior, Ralph Lauren o incluso Chanel. Y es que la madre ha reconocido que prefiere gastarse esas sumas de dinero en vestuario para sus pequeños que para sí misma.

• Un total de cuatro horas son las que la mujer pasa arreglando a los gemelos antes de salir de casa e incluso para poder hacerles las fotografías que luego sube a la citada red social.

Polémica abierta

Muchos son los seguidores que ya han conseguido tener en poco tiempo Isabella y Jacob. Pero también cuentan con detractores. En concreto, estos últimos no rechazan a los pequeños sino a la actitud de sus padres de gastar esas sumas de dinero en vestir a sus hijos, cuando en el mundo hay tanta hambre. Unas críticas que no han dudado en contestar diciendo que cada uno hace viste a sus hijos como desea y hace con su cuenta corriente lo que más le gusta. Buena muestra de eso es que no sólo se gastan cantidades desorbitadas para la ropa sino también para el resto de artículos que necesitan los pequeños. Así, se ha dado a conocer que les compran peluches de 600 euros, sillas de paseo de 6.000 euros e incluso biberones con incrustaciones de Swarovski de 1.600 euros. Y es que parece ser que no hay dinero suficiente para que estos padres británicos celebren la felicidad que sienten por tener a sus hijos, que fueron fruto de una fecundación in vitro de 25.000 euros.