La oposición achaca a las presiones del PSOE la renuncia de Far en la Oficina Anticorrupción

La oposición al Ejecutivo balear, ha exigido explicaciones al Govern de la presidenta socialista, Francina Armengol, por la renuncia de Jaime Far al cargo de director de la Oficina de Prevención y Lucha contra la Corrupción.

Desde las filas del PP, su portavoz parlamentario, Toni Costa, en declaraciones a los medios  tras la reunión de la Junta de Portavoces, consideró que «hay algo detrás» de esta dimisión exigiendo los populares la comparecencia del dimisionario en el Parlament. 

Costa cree necesario que Far explique las razones que han motivado su renuncia y que haga balance de los cuatro años al frente del organismo.

Según el diputado popular,  «hay incógnitas que se han de resolver y hay algo más detrás de la dimisión de Far», puesto que éste «ha puesto en duda determinadas actuaciones del Govern y del PSIB-PSOE» y «a lo mejor a algunos les resultaba incómoda esta independencia».

«Creemos que puede haber algo más que cuestiones profesionales a la hora de presentar esta dimisión», señaló, añadiendo que «hay que saber si las presiones que se han producido tienen que ver con esta dimisión».

En la misma línea se ha expresado la portavoz del Grupo Ciudadanos, Patricia Guasp, que reiteró que no le sorprende la renuncia, ya que «hace muchos meses Far se había encontrado con trabas en el ejercicio de su trabajo». «Se le había denegado el aumento de recursos para llevar a cabo las funciones que este Parlament aprobó», lamentó.

También el portavoz del Grupo Mixto-Més per Menorca, Josep Castells,  recordó que hace seis meses su formación advirtió «sobre la persecución» del PSOE al director de la Oficina. Por ello vinculó «el desenlace» del director «con esta actitud de beligerancia que viene por algunas actuaciones de la Oficina que molestaron al PSOE».

Ante estas declaraciones, la portavoz adjunta del Grupo Socialista, Silvia Cano, defendió que la renuncia de Far «ha sido por motivos personales» e indicó que ha sido un director que «ha ejercicio su tarea con libertad e independencia». Respecto al futuro de la Oficina de Prevención y Lucha contra la Corrupción, Costa destacó que el PP no considera necesario este organismo, puesto que tiene «duplicidades» e «igual habría que hacer una reflexión profunda sobre qué se ha de hacer con la oficina”.

Por su parte, el portavoz del Grupo El PI-Proposta per les Illes Balears, Josep Melià, resaltó que «es el momento de hacer un replanteamiento de esta oficina» y reclamó que el organismo esté dentro de la Sindicatura de Comptes. Para Melià, el organismo, con un presupuesto de un millón de euros, es «excesivamente caro y cae en duplicidades evidentes».

Desde Ciudadanos, Guasp insistió en que «la Oficina Anticorrupción es completamente necesaria en Baleares, al igual que lo es en otras comunidades autónomas». «Nada tiene que ver lo que hace la Oficina con lo de la Sindicatura de Comptes», indicó.

El diputado de Més per Mallorca Joan Mas ‘Collet’ reiteró la necesidad de esta Oficina Anticorrupción y criticó que el PP diga que «no quiere invertir en esta cuestión». «Baleares era el paradigma de la corrupción cuando gobernaba al PP», añadió.

Asimismo, tanto Unidas Podemos como el PSIB-PSOE reiteraron su compromiso con la Oficina Anticorrupción, y consideraron que el organismo debe continuar tras la renuncia de Far. Preguntados por el perfil del futuro director, los diferentes grupos señalaron la «independencia» como la principal característica que ha de tener.

En concreto, Patricia Guasp, subrayó que debe ser «una persona de prestigio con formación y experiencia de más de diez años en el sector», mientras que Joan Mas ‘Collet’ reclamó que sea «independiente, muy buen profesional y muy trabajador».

También Josep Castells apuntó que la independencia ha de ser la principal característica, aunque aseguró que cree que «no habrá nuevo director o que será una persona totalmente fiel al PSIB». «Hemos entrado en una dinámica de desaparición de esta oficina», lamentó.