El ex alcalde socialista de Palma mintió a los ciudadanos: no movió un dedo para proteger El Bungalow

El ex alcalde socialista de Palma, José Hila, mintió a los ciudadanos y no movió un dedo para proteger el popular restaurante playero El Bungalow, incumpliendo así el acuerdo de pleno alcanzado por unanimidad en noviembre del año pasado cuando aún quedaban seis meses para concluir la legislatura, que obligaba a su catalogación y protección.

Una iniciativa de la que el anterior gobierno municipal de socialistas, separatistas de Més y Podemos, ahora en la oposición, se desentendió por completo, y que deja ahora en manos de Demarcación de Costas la materialización del derribo de este inmueble en caso de que prospere la iniciativa presentada para este fin por los ecologistas del Gob.

Desde el departamento de Patrimonio del Consell de Mallorca, organismo  encargado de su protección, han confirmado a este periódico que no se ha recibido solicitud alguna por parte del Ayuntamiento de Palma y desde la Concejalía de Urbanismo de Palma, el edil Óscar Fidalgo es más tajante al respecto: «No hicieron absolutamente nada», afirma, lo que confirma que ni tan siquiera el anterior equipo de gobierno inició los trámites para la catalogación municipal de este inmueble marítimo centenario y evitar así en primera instancia su derribo.

La cruda realidad desmiente las afirmaciones de la ex concejala separatista de Modelo de Ciudad, Neus Truyol, que el pasado mes de enero (dos meses después de la aprobación de la citada moción del pleno, y a falta de cuatro meses para las elecciones municipales) aseguró a preguntas del ex concejal del PP, Julio Martínez, que su departamento estaba «buscando información para poder justificar que El Bungalow se pueda proteger».

Ya entonces el ex regidor del PP se veía venir lo que un año después se ha confirmado, y expresaba su preocupación de que la dilación del anterior gobierno estuviera motivada por una «falta de voluntad política, ante las presiones de colectivos ecologistas como el Gob», afín al anterior gobierno municipal y a formaciones políticas separatistas como Més, que se autocalifican de ecosoberanistas.

La entidad ecologista nada más aprobar el Ayuntamiento aquel acuerdo plenario para su protección, hizo público un comunicado oponiéndose a la decisión, y exigiendo el derribo del popular restaurante costero palmesano, algo que se repitió la semana pasada.  En este caso, con una instancia remitida a Demarcación de Costas exigiendo la demolición y retirada de las edificaciones de este inmueble.

El incumplido acuerdo de pleno instaba al anterior gobierno municipal ahora en la oposición, a «iniciar todos los trámites, informes técnicos, estudios patrimoniales y el resto de valoraciones necesarias para poder proteger y en un futuro próximo catalogarlo».

Junto a ello se solicitaba a Demarcación de Costas «la paralización cautelar de todas las actuaciones, mientras concluían los trámites para la protección» de este referente urbanístico de la costa palmesana que data, como mínimo, del año 1921, e incluso hay registros que situarían su construcción en 1912 o 1880.

Ni una cosa ni la otra hizo el ex alcalde socialista Hila, en una dejación de funciones que puede tener nefastas consecuencias para el futuro de este popular establecimiento, en caso de que Demarcación de Costas actúe, tras la reclamación de los ecologistas del GOB .

De hecho en julio de 2022 el Ministerio para la Transición Ecológica denegó la solicitud para legalizar la ocupación del dominio público marítimo terrestre de El Bungalow, y otorgaba al restaurante un plazo de seis meses para demoler las instalaciones y restituir los terrenos a su estado original, advirtiendo que de no proceder, se ejecutaría la demolición de forma subsidiaria con el desembolso de los trabajos a cargo del concesionario.