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El barco romano que naufragó en la Bahía de Palma en el siglo IV será trasladado al Castillo de San Carlos

Se instalará en el interior de un estanque para su desalinización y exhibición al público

Los científicos advirtieron del riesgo de destrucción ante cualquier temporal al estar a 60 metros de la costa

Barco romano Palma
Uno de los investigadores del pecio de Ses Fontanelles.
Indalecio Ribelles
  • Indalecio Ribelles
  • Redactor de OKBaleares, información local de Palma, social y política. Antes, redactor en EL MUNDO/ Baleares durante 20 años.

El Ayuntamiento de Palma avala y ha dado el visto bueno a la propuesta del departamento de Patrimonio del Consell de Mallorca para el traslado del barco romano hundido en el mar en la Bahía de la capital balear, a un estanque que se construirá en los aledaños del Castillo de San Carlos, para su desalinización y exhibición al público durante año y medio.

Así lo ha informado en rueda de prensa el concejal de Urbanismo, Óscar Fidalgo, que ha puesto en valor esta iniciativa al tratarse de uno de los pecios mejor conservados del mundo que «se quiere extraer entero del interior agua y trasladarlo a San Carlos para ubicarlo en el interior de un estanque desalinización y, después se decidirá donde se podrá instalar definitivamente».

El pecio tardo romano descubierto de forma casual en el verano de 2019 en la playa palmesana de Ses Fontanelles, en uno de los enclaves turísticos más concurridos de la capital balear, permitió la excavación integral del cargamento de la embarcación, llevada a cabo entre los meses de noviembre de 2021 y febrero de 2022.

El Ministerio de Cultura autorizó la construcción del estanque en noviembre del año pasado avalando la propuesta del departamento insular de Patrimonio, y este tesoro subacuático en el que trabajan técnicos de Patrimonio del Consell e investigadores de la las universidades de Baleares, Cádiz y Barcelona, podrá ser trasladado al Castillo de San Carlos en Palma.

Hundida en pleno siglo IV d. C, el precio de 12 metros de eslora por seis de manga que se encuentra en un excelente estado de conservación, contiene elementos muy singulares, como es el caso de los mamparos de madera de separación de la carga o la conservación del pozo de sentina. Igualmente, sobresale el buen estado de conservación de la madera de la embarcación, gracias a la ausencia de oxígeno en el lugar del enterramiento.

De su interior se recuperaron un conjunto de en torno a 300 ánforas de transporte, parte de ellas íntegras y otras completas, pero fragmentadas que fueron usadas para el almacenaje tanto de salsas de pescado fermentado, aceite, vinos o mostos fermentados para la conservación de fruta.

La relevancia internacional y notable importancia histórica que presentan estas ánforas es que se encuentran completas, además de presentar inscripciones pintadas junto a restos de los paleocontenidos originales, lo cual constituye una ocasión prácticamente única a nivel global.

De hecho es el primer pecio romano conocido con un cargamento de esta región naufragado en aguas del Mediterráneo, dado que hay pocos barcos conocidos con este cargamento hispánico.

El tanque de desalinización en el que se ubicará estará situado en la zona de las antiguas casas militares del recinto fortificado y una vez que se realice toda esta operación de traslado y desalinización «podrá ser visitado por el público pero no estará siempre en el estanque, sino que será después trasladado a otro lugar», apuntó el concejal del PP.

Su traslado era un deseo de la comunidad científica. La zona de playa en la que se encuentra, apenas a 60 metros de la línea de costa y a unos dos metros de profundidad,  supone un notable riesgo de potencial destrucción si los temporales que propiciaron su descubrimiento se vuelven a producir, dado que se encuentra en en la línea de rompiente de olas. A ello hay que unir el hecho de que esta playa de Can Pastilla es una de las más concurridas de la capital balear.

De hecho el Consell de Mallorca, titular de las competencias en materia de Patrimonio Histórico además de proceder a la excavación integral y recuperación del mobiliario, ya propuso la posibilidad de extraer el casco de la embarcación para garantizar su conservación, puesta en valor y musealización.

Por ello invitó en 2022 a varios especialistas de reconocido prestigio para que realicen un informe externo sobre la importancia del hallazgo y la conveniencia de su extracción para garantizar su conservación.

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