El papa Francisco recibirá a Juanma Moreno en el Vaticano el 21 de marzo
El presidente le trasladará "la realidad de Andalucía y el aliento de los andaluces en su lucha por la paz y la igualdad"
El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha avanzado este miércoles que el próximo 21 de marzo, víspera del Viernes de Dolores, será recibido en audiencia en el Vaticano por el papa Francisco, al que le trasladará «la realidad de Andalucía, que trabaja cada día por ser mejor, y el aliento de los andaluces en su lucha por la igualdad y la paz en el mundo». «Será un inmenso honor y un momento muy especial como persona y como presidente», ha afirmado el líder de la Junta.
Moreno, que ha participado en Sevilla en el acto de relanzamiento de un nuevo medio de comunicación, ha indicado que «España necesita la visión del sur y la presencia ponderada que supone la mirada desde Andalucía».
Una tierra que, según ha remarcado, «es respetada, admirada y que está consiguiendo hitos que hasta hace poco parecían imposibles, como tener el mayor número de ocupados, batir el récord en inversión extranjera productiva o superar por primera vez a la Comunidad de Madrid en número de empresas activas».
«Nos afanamos en un sueño que esperamos conseguir: que esta tierra marque el paso en el conjunto de España, que sea cada vez más líder y que se haga con acento andaluz. Espero que El Correo de Andalucía pueda contar buenas noticias para los andaluces, como que esta comunidad sea la más próspera en términos de empleo y de crecimiento económico», ha añadido.
El estado de salud del papa
El papa Francisco, que el pasado verano pasó nueve días ingresado en el hospital Gemelli de Roma tras ser operado de una hernia abdominal, pidió este miércoles a su colaborador, el sacerdote italiano Pierluigi Giroli, que leyese en su lugar la catequesis de la audiencia general que el sumo pontífice presidió en la plaza de San Pedro.
«Queridos hermanos y hermanas, todavía estoy resfriado y no puedo leer bien el catecismo, lo leerá un ayudante mío», señaló Francisco ante los 6.000 fieles reunidos en la plaza de San Pedro. El papa, de 87 años, se sometió la semana pasada a varios controles médicos por una leve gripe y el pasado sábado reveló que padecía una «bronquitis».
En el aula de las Bendiciones del Palacio Apostólico, frente a los magistrados vaticanos para la inauguración del año judicial, Francisco tuvo que interrumpir varias veces su alocución por los ataques de tos. Por ello, acabó pidiendo a su colaborador monseñor Filippo Ciampanelli, funcionario de la Secretaría de Estado, que leyera el discurso que había preparado, tal y como hizo en días anteriores.
«Les agradezco a todos ustedes; yo he preparado un discurso, pero sientan mi incapacidad de leerlo por la bronquitis», admitió el Papa. En todo caso, Francisco ha cumplido con todos los compromisos que tenía previstos esta semana.
Además, el papa renovó en sus saludos a los peregrinos italianos su invitación a rezar «por los pueblos que sufren el horror de la guerra en Ucrania y en Tierra Santa, así como en otras partes del mundo». E insistió: «Recemos por la paz, pidamos a Dios el don de la paz».