Una lluvia de cohetes genera una estampida de aficionados marroquíes en Sevilla
Una turba de aficionados de Marruecos disparan fuegos artificiales contra una multitud en Sevilla
Despliegue policial en el centro de Madrid y varios distritos para evitar disturbios por el partido
Marruecos ha derrotado a España en el Mundial de Qatar y los aficionados marroquíes en Sevilla lo han celebrado disparando fuegos artificiales y cohetes contra una multitud de gente. Ha ocurrido en el parque empresarial de la capital andaluza cerca de la Avenida de Andalucía donde aficionados de Marruecos han causado una algarada tras la victoria de su selección. Los antidisturbios de la Policía Nacional ya han desplegado sus efectivos para garantizar la seguridad en las calles. Estos han sido recibidos por pitidos y abucheos de los hinchas norteafricanos.
La Policía Nacional también se ha desplegado en Madrid. Concretamente en el distrito Centro y otros distritos de la capital para evitar posibles disturbios tras el partido del Mundial de fútbol entre España y Marruecos, según ha indicado ante los medios la delegada del Gobierno en Madrid, Mercedes González.
No obstante, González ha lanzado un mensaje de «tranquilidad, de calma y serenidad» porque no ve realista las comparaciones como las que se están haciendo sobre los disturbios que se produjeron en otras ciudades europeas tras los partidos en los que jugaba Marruecos. «En ningún partido de esta selección en Madrid se ha producido ningún tipo de incidentes», ha apuntado González.
Según ha explicado, en la demarcación de la Guardia Civil se ha realizado un análisis de riesgos y no ven ninguno en el partido de fútbol de mañana. Además, ha recordado que en el Plan de Seguridad de Navidad, presentado la semana pasada, ya hay desplegados más de mil policías diarios en todas las zonas centrales de Madrid.
En cuanto al partido, a España volvió a salirle cruz en la lotería de los penaltis y quedó fuera de los cuartos de final del Mundial ante una selección de Marruecos organizada, solidaria y entusiasta. El partido fue táctico y feo. Feísimo. Un tostón insoportable. Sin áreas ni ocasiones, la selección de Luis Enrique tuvo el balón, pero fue inoperante e inocua a la hora de crear peligro en los 120 minutos incluida la prórroga. En los penaltis, fuimos incapaces de marcar ninguno, así que nos quedamos fuera del Mundial por nuestros propios deméritos. Que fueron muchos.