Macron llama «criminal» a Al Assad y dice que tendrá que ser juzgado
El jefe de Estado francés, Emmanuel Macron, estimó este martes que el presidente sirio, Bashar al Assad, es un «criminal» que debe ser juzgado por la justicia internacional, al tiempo que llamó a crear un «grupo de contacto» para encontrar una solución política al conflicto.
«Bachar al Asad es un criminal, él deberá ser juzgado y responder a sus crímenes ante la justicia internacional. Pero yo no he hecho de su destitución una condición previa por pragmatismo», dijo Macron durante una rueda de prensa, señalando que le corresponde al pueblo sirio «escoger libremente al dirigente que le sucederá».
Poco antes, ante la Asamblea General de Naciones Unidos, el mandatario francés abogó por la creación de un «grupo de contacto» sobre Siria, con el fin de impulsar una nueva dinámica para encontrar una solución política al conflicto que deja más de 330.000 muertos y millones de refugiados desde 2011.
Las negociaciones llevadas a cabo en Astaná (Kazajistán), por Rusia, Irán y Turquía, y que no contemplan los aspectos políticos, «no es suficiente», añadió.
El grupo ideado por Francia estaría compuesto por los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU «y las partes implicadas» en el conflicto, precisó Macron, en su primer discurso ante la cita anual de líderes mundiales en Nueva York.
No explicó sin embargo si Irán, uno de los protagonistas mayores de la guerra y rechazado por Estados Unidos, estaría asociado a las discusiones.
Desde el inicio del conflicto se han creado varios grupos, el más reciente fue el Grupo de Apoyo Internacional a Siria (GISS, sigla en inglés), creado en 2015 y que permitió la adopción de una hoja de ruta para un acuerdo político.
Pero el GISS, copresidido por Estados Unidos y Rusia, pereció después de que el régimen sirio retomara la ciudad de Alepo a finales de 2016, lo que marcó un giro en la guerra a favor de Damasco y sus aliados.
Las conversaciones en Astaná están apadrinadas por Rusia e Irán, aliados de Damasco, y Turquía, sostén de los rebeldes.
Por otro lado, las negociaciones políticas entre el gobierno sirio y la oposición realizadas desde 2016 en Ginebra (Suiza), bajo la égida de la ONU, no han logrado avanzar.