Una asociación de vecinos veta el restaurante de los Messi en Barcelona
Ya hasta en Barcelona los Messi no las tienen todas consigo. La Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB) mostró su rechazo a la apertura de un gran restaurante gestionado por Rodrigo Messi en el barro de Gracia, concretamente en el interior de una isla del Eixample de la ciudad.
Los vecinos residentes en el interior de la isla, delimitada por las calles Còrsega, Enric Granados, Balmes y Rosselló, de Barcelona, han expresado el repulsa hacia el restaurante a través de una recogida de firmas por culpa del ruido que causa el recinto. Sin embargo, el consejo del distrito del Eixample de Barcelona concedió a los promotores del restaurante –antes de la apertura– una licencia de bar-restaurante, con actividad complementaria con música de fondo ambiental y otras actuaciones en directo.
En una nota publicada por la FAVB se asegura que «este establecimiento romperá el silencio actual del entorno, actuando como una caja de resonancia, como ya sucede con las terrazas de hoteles próximos situados en otras islas del Eixample». La superficie útil del restaurante es de 905,69 metros cuadrados y un aforo simultáneo para 298 personas, además de una terraza en la calle para unos 48 usuarios adicionales.
La polémica está servida porque la FAVB asegura que la licencia que le ha dado el consistorio catalán sólo incluye el interior del edificio y no la terraza. «Este restaurante es una agresión frontal contra el derecho al descanso y a la tranquilidad de los vecinos residentes».
El restaurante abrió el pasado viernes, día 22, tras realizar las pruebas de carta y menú, y es el resultado de la alianza empresarial de Rodrigo Messi, hermano del futbolista Lionel Messi, con los hermanos restauradores Juan Carlos, Borja y Pedro Iglesias.