El ex presidente de Bolivia Carlos Mesa: «Podemos forma parte de la red de seguridad de Evo Morales»
Carlos Mesa (La Paz, 1953) fue presidente de Bolivia entre 2003 y 2005. Anteriormente fue vicepresidente del país durante los años 2002 y 2003. Ahora, tras el fraude electoral cometido por Evo Morales y su posterior huida a México, ha decidido presentarse de nuevo a los próximos comicios presidenciales, que se celebrarán a comienzos de 2020.
Mesa, que se encuentra en Madrid para asistir a la Cumbre del Clima, habla con este periódico sobre el desastre político que ha supuesto el largo mandato de Evo Morales y de los riesgos que supondría que Pedro Sánchez lograra formar un gobierno con Podemos.
PREGUNTA: Venezuela pagó a los líderes de Podemos más de 7 millones de dólares a través de la Fundación CEPS. ¿En qué se convertiría España, si finalmente, Iglesias como vicepresidente se dedicara a “extender el movimiento bolivariano»?
RESPUESTA: La pregunta es complicada. No me gusta que terceros opinen sobre la política interna de mi país sin conocimiento. No tengo los elementos que me acabas de dar, que para mí son una novedad, como para juzgarlo. En todo caso, creo que desde el punto de vista de las ideas, más allá de las cuestiones materiales, no encuentro una relación que tenga posible vínculo entre las ideas bolivarianas planteadas por Hugo Chávez y el desastre que resultó como propuesta política y lo que podría tener España como propuesta de futuro.
P: Si finalmente Pedro Sánchez forma un gobierno con Podemos, ¿a qué riesgos se expone España?
R: Tengo confianza en que las relaciones exteriores que tenga el gobierno de España si eventualmente se llega a concretar el gobierno definitivo en una alianza principal no exclusiva entre el PSOE y Podemos mantenga una línea como la que ha mantenido España hasta ahora. Una línea de prudencia, equilibrio y de análisis en término de los hechos objetivos y no en un alineamiento ideológico. Creo que ese es el mayor daño que se le puede hacer a una sociedad democrática. En América Latina el alineamiento ideológico ha definido la línea amigos-enemigos no en función de razones o de Constitución, sino en función de ideas o de ideologías fundamentalmente. Creo, y en esto tengo la expectativa, que el gobierno del presidente Pedro Sánchez, si se confirma, no se deje llevar por una línea de apoyo evidente como es la de Podemos al expresidente Evo Morales, sino lo que han sido las relaciones exteriores en el largo tiempo por parte del gobierno español.
P: ¿Por qué Podemos miente a la opinión pública diciendo que en Bolivia ha habido un golpe de Estado?
R: Por una razón ideológica y por la construcción del relato de una estructura que ha sido una especie de red de seguridad del expresidente Evo Morales de las que forma parte Podemos. Eso ha ocurrido en el ámbito intelectual, mediático y político. A Evo Morales le conviene el victimismo, que se olvide que fue un presidente autoritario que vulneró la Constitución varias veces, que controlaba ilegítimamente los cuatro poderes del Estado. Y ese victimismo se subraya con la hipótesis de que las Fuerzas Armadas le pidieron su renuncia como si no se hubieran producido 21 días de manifestaciones populares que marcaron una línea cada vez más crítica, exigiéndole que cumpliera la Constitución. Y ha ido siempre más rápido de lo que el Presidente respondía. Creo que tiene que ver con una estrategia de victimismo para tratar de justificar lo injustificable, que es la forma que gobernó Evo Morales y el fraude escandaloso que llevó adelante.
P: Si Sánchez cede y deja RTVE en manos de Podemos, ¿se vería perjudicada la libertad de prensa en España?
R: Por supuesto. En el caso de Bolivia no hay debate y hay que recomponer la institucionalidad de un medio del Estado y no un medio del Gobierno. Yo sigo con frecuencia Televisión Española desde mi país y tengo un gran respeto por Televisión Española, tanto en el periodo en el que gobernó el PP como cuando lo hizo el PSOE. Entiendo las críticas que pueden haber que se conocen en el detalle del funcionamiento sobre toda la política interna española. Creo que el error más grave sería entregar a un partido el control de un medio de comunicación. Las palabras ‘entregar’ y ‘control’ definen de hecho ya lo que esto podría representar. Yo creo que el éxito de Televisión Española es su neutralidad desde el punto de vista de medio estatal y la defensa de los intereses de España por encima de los intereses políticos.
P: ¿Evo Morales cometió fraude electoral?
R: Sin ninguna duda. Precisamente hace menos de 24 horas la OEA (Organización de los Estados Americanos) ha hecho a conocer su informe final muy extenso, muy claro y muy detallado, en el que la constatación es de un fraude monumental. Cuando tú alteras la votación para modificar entre seis y siete puntos la diferencia de votos, el fraude tiene un tamaño gigantesco. Fue realizado conscientemente por el Gobierno, por el Presidente con el Tribunal Supremo Electoral, que era su ejecutor.
P: Si tuviera que definir la trayectoria política del Evo Morales, ¿estaría más cerca de un gobierno democrático o de un régimen dictatorial?
R: Creo que hay una primera fase en la que hay un proyecto político que se envilece, se desvirtúa y se rompe. También hay una segunda parte, la más larga, que tiene como protagonista un Presidente autoritario de intención y de acción; y después, si llevaba a cabo el fraude y éste tenía éxito, camino claro a la dictadura al estilo venezolano.
P: ¿Cree que desde la presidencia de Bolivia Evo Morales ha estado favoreciendo el negocio del tráfico de cocaína? Y si es así, ¿puede ser ésta la explicación al apoyo masivo de la izquierda latinoamericana a Evo Morales?
R: No creo que se pueda hacer una relación de causa y efecto entre la producción de la coca/cocaína en Bolivia y el apoyo internacional. Lo que es evidente es que el respaldo más importante desde el punto de vista sindical del Gobierno del presidente Evo Morales eran las seis federaciones de productores de coca de la zona tropical de Bolivia, El Chapare. El 90% de esa coca se convierte en cocaína. Ese es un hecho objetivo. Y el presidente Evo Morales era el presidente ejecutivo de la federación. No puedo ir más lejos que eso.
P: ¿Cuál será su primera medida si gana las próximas elecciones presidenciales en Bolivia?
R: La fundamental, que tiene que ver con la separación de poderes. En concreto, la reforma y la reinstitucionalización del sistema judicial. No puede haber en un país democrático una democracia sin justicia. Un país que no tiene justicia para todos no es un país democrático. Y eso implica una cirugía mayor bajo el mandato de la Constitución a partir de una consulta popular, pero sobre todo a partir de la comprobación de las elecciones por voto popular que se hicieron. En Bolivia se elige por voto directo a todos los miembros del Tribunal Supremo de Justicia, del Tribunal Constitucional, del Tribunal Agroambiental y del mecanismo del control judicial. Ese mecanismo de voto llevó a un voto de 60% nulos y blancos. Es la primera vez en una democracia en que el número de votos nulos y blancos es mayor que el número de votos válidos. Por lo tanto, hay que volver a hoja cero, y hacer una elección correcta y adecuada de los mejores para el poder judicial.