Ahora se entiende el furor sanchista de Silvia Intxaurrondo
El mismo día en el que la periodista Silvia Intxaurrondo exhibió una insólita agresividad contra el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, en la entrevista que le realizó dentro de la campaña electoral para los comicios generales del 23-J, en el programa La hora de la 1 en TVE, el ente público abría el expediente de renovación de su contrato por dos años más, desde septiembre de 2023 a septiembre de 2025. Cualquiera diría que ese hecho llevó a la periodista a saltarse las más elementales reglas de la neutralidad que deben imperar en una televisión pública para convertirse en una hooligan del sanchismo, al permitirse, incluso, cuestionar una respuesta del líder de los populares con un sonoro «es mentira».
Lo que no es mentira es que Silvia Intxaurrondo fue renovada con un sueldo de 530.000 euros por dos años de contrato, cantidad que recibe a través de la sociedad Sukun Comunicación SL, de la que es administradora solidaria junto a Jhinaoui Farouk. Esta sociedad se creó a finales de julio de 2023 con un capital de 3.200 euros. El hecho de que Intxaurrondo cobre a través de una mercantil responde, en lógica, a que de ese modo se beneficia de una mejor tributación fiscal. Anteriormente, Silvia Intxaurrondo cobraba a través de la productora del programa, Teseo, que era quien abonaba el sueldo a la presentadora. Después, en julio pasado, la periodista decidió pasarse al régimen mercantil para aliviar, se supone, la carga fiscal derivada de un sueldo tan elevado.
No es criticable, pero sí constatable, sobre todo teniendo en cuenta que su enfrentamiento con Feijóo giró en torno al incremento de las pensiones durante la época del PP. La periodista siguió el guion que en dicha materia recita la izquierda, que viene cargando contra la «insolidaridad» de los populares. Intxaurrondo, hay que reconocerlo, es agradecida. Más de medio millón de euros por dos años de contrato dan para cargar contra Feijóo y hacerse, por la cuenta que le tiene, del club de fans periodístico de Pedro Sánchez.