Sánchez al choque con Ayuso: examina si su Ley Trans que protege a los menores «colisiona» con la estatal

El Gobierno de Pedro Sánchez está analizando las reformas de la ley Trans y la ley LGTBI, que el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso culminó el pasado viernes con su aprobación en la Asamblea de Madrid, por si «colisionan» con la normativa estatal.

Así lo ha avanzado el delegado del Gobierno en la Comunidad de Madrid, Francisco Martín, que en una entrevista radiofónica ha dejado constancia de su «preocupación» por estas modificaciones que, a su juicio, suponen un «retroceso de derechos por primera vez en nuestro presente democrático».

A pesar de la gravedad de sus declaraciones, Martín no ha especificado ninguno de esos supuestos derechos que se han visto recortados por la modificación de estas leyes, que desde el grupo parlamentario popular defienden porque se «aumenta la protección de los menores» y se establece mayor «seguridad jurídica».

Sin embargo, desde el Palacio de la Moncloa no opinan igual y, tal y como ha revelado el delegado del Gobierno, el Ejecutivo ya está analizando los nuevos textos para, en el caso de que se produjera esa presunta «colisión» con las normas estatales, «detener» su aplicación en la Comunidad de Madrid.

Francisco Martín, que se hizo conocido al poco de relevar a Mercedes González como delegado del Gobierno en Madrid por sus alabanzas a Bildu, también se ha quejado de la relación que su departamento tiene con el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso.

«Desafortunadamente, no hay reuniones previstas -con la Comunidad de Madrid-. Podemos mejorar sustancialmente en este ámbito», ha lanzado en una entrevista en RNE, al tiempo que ha reclamado una «colaboración constructiva y real».

«Tenemos que encontrar soluciones a los problemas de los madrileños más que crear polémicas artificiales que distraen de los problemas de gestión reales que son los que nos deberían ocupar», ha expuesto.

A pesar de esa fingida voluntad de entendimiento con el Gobierno de Ayuso, lo cierto es que cada vez que tiene ocasión, el delegado se dedica a criticar a la presidenta autonómica. Sin ir más lejos, el pasado 4 de diciembre, durante la celebración del 45 aniversario de la Constitución española celebrada en la Real Casa de Correos de la Puerta del Sol, Francisco Martín aprovechó su intervención, que alargó durante más de 12 minutos pese a haberse comprometido a ceñirse a los 7 establecidos por el protocolo, para cargar duramente contra la jefa del Gobierno madrileño.

«Centrémonos más en coser las brechas reales y menos en abrir nuevas heridas. Defender la constitución, y hago mías las palabras del presidente del Gobierno, es no responder al insulto, con más insulto; al ruido, con más ruido; y a la bronca con más bronca», lanzó.

Además, aseguró que la Constitución es «respeto y convivencia» frente a «algunos cantos de sirena que lamentablemente hemos escuchado en las calles». «Reivindico una defensa auténtica de la Constitución», apostilló un día después de que el PP celebrara una nueva manifestación contra la amnistía.

«Los madrileños y madrileñas están cansados de polémicas artificiales. Se merecen y esperan que sus instituciones cooperemos sin vetos ni puertas cerradas», agregó. A pesar de la retahíla de reproches a Ayuso del delegado del Gobierno, que fueron desde la violencia de género a las chabolas de la Cañada Real, pasando por la no renovación del Consejo General del Poder Judicial -con acusaciones al PP de «deslealtad constitucional»- y la modificación de las leyes LGTBI y Trans de Madrid, Martín afirmó que tiene la «firme voluntad» de «recuperar unas relaciones institucionales cordiales y colaborativas».

Reforma de Ayuso

«Es una reforma que lo que pretende es sustituir todos aquellos artículos de ambas leyes que eran más ideológicos que efectivos en la protección de los derechos de todas las personas. El objetivo principal de esta reforma es sustituir la ideología por ciencia. Hemos escuchado el clamor de sociedades científicas y de padres que estaban reclamando un cambio en estas leyes para proteger a la infancia», explicó la diputada del PP y portavoz en la Comisión de Familia y Asuntos Sociales, Mónica Lavín, en una entrevista con OKDIARIO.

Entre otras cosas, el nuevo articulado de la Ley Trans de la Comunidad de Madrid establece que, a partir de ahora, para «iniciar el tratamiento farmacológico será requisito necesario que previamente los menores reciban apoyo de los profesionales de salud mental infanto-juvenil, mantenido durante todo el proceso y en el caso de que existiera comorbilidad será imprescindible un informe favorable del profesional que esté tratando al menor en dichas patologías».

Así, según celebran desde el grupo parlamentario popular, con esta reforma se «refuerza la necesidad del acompañamiento de los profesionales expertos en transexualidad, especialmente en los casos de menores».

«Se trata de evitar identificar erróneamente como un problema de cambio de sexo en niños y adolescentes otras situaciones –por ejemplo, falta de madurez, problemas de adolescencia, modas, etc.– que nada tienen que ver», agregan.

Además, otro de los aspectos más relevantes de la reforma es la supresión de la inversión de la carga de la prueba que se contemplaba hasta ahora en el articulado. En virtud de la legislación que se aprobó en 2016, «corresponde a aquel a quien se atribuye la conducta discriminatoria, la aportación de justificación probada objetiva y razonable de las medidas adoptadas».