Se busca: Éstos son los terroristas callejeros que tiraban piedras y botellas a Vox y la Policía
Vox va a denunciar ante un juzgado este jueves la violencia desatada por los grupos de ultraizquierda que el miércoles intentaron reventar el acto en Vallecas. Una lluvia constante de piedras y palos, amenazas de muerte y agresiones a la Policía y a los simpatizantes del partido que enturbió la presentación de la campaña de los de Santiago Abascal. La Brigada de Información de la Policía Nacional investiga las fotografías del acto para identificar a los cabecillas. Ya hay cuatro detenidos, uno de ellos menor de edad.
Los servicios de emergencia madrileños atendieron in situ a 14 personas por heridas de diversa consideración. Entre los agredidos se encuentra Ángel López, diputado de Vox por Guadalajara. Fue derivado a La Paz con una fractura por una pedrada en la mano. Un policía sufrió una luxación y 16 agentes más tuvieron que ser atendidos. Uno de ellos aún espera el alta hospitalaria.
La imagen que mejor escenifica la violencia que la ultraizquierda desplegó este miércoles en la Plaza de la Constitución de Vallecas es la de un grupo de individuos pateando en el suelo a un agente de las Unidades de Intervención Policial (UIP). Con la mascarilla tapándole los ojos y sin casco, el antidisturbio se encuentra de rodillas en el suelo mientras un energúmeno con un anorak azul le lanza una patada a la zona costal. Instantes antes se había enfrentado a la Policía levantando los puños. Lleva un tatuaje en su mano derecha que lo hace «muy identificable».
Ese individuo es sólo uno de los rostros que la Policía Nacional investiga ya para identificar a los autores de ésta y otras agresiones del miércoles. La Brigada de Información provincial de Madrid revisa en estos momentos abundante material audiovisual para encontrar pistas y pruebas sobre los causantes de la violencia contra Vox y la Policía. Hasta el momento hay cuatro detenidos, pero serán más. A lo largo del día se esperan más detenciones.
El operativo policial concluyó a las once de la noche, varias horas después de la finalización del acto. Agentes de la UIP se esmeraron hasta esta hora en desalojar a los últimos grupúsculos que aún quedaban activos y representaban una amenaza.
Identificación difícil
Medio trabajo ya está hecho, aseguran fuentes policiales involucradas en las tareas de identificación de los violentos de ultraizquierda. Durante las horas previas al acto se identificó a buena parte de los radicales. Sin embargo, los agentes saben que los elementos más violentos no aparecieron en el lugar hasta el momento de las cargas. Precisamente para evitar su identificación. Es su modus operandi: evitan hacer acto de presencia antes de que reine el caos para no estar ‘fichados’.
Entre los individuos que están siendo investigados hay varios relacionados con el grupo ultra ‘Bukaneros’ del Rayo Vallecano. El proceso de identificación es complejo: las mascarillas han ayudado a los violentos a ocultar su rostro.
Podemos lo justifica
Durante el acto, Santiago Abascal fue muy crítico con la actuación policial al considerar que el despliegue era insuficiente y que no hubo órdenes de actuar con contundencia. «Esto es lo que os representa. Esta es vuestra única fuerza. Hoy podría haber habido aquí muertos. Vamos a estar aquí hasta el final. Me dirijo al jefe del dispositivo, para que evite que se sigan lanzando objetos y podamos decir hasta la última palabra. Este acto no acabará hasta entonces», aseguró Abascal.
Las piedras y adoquines lanzados contra Vox en Vallecas, así como otros objetos como un palo, quedaron bajo custodia de la organización del partido. El objetivo es presentar todo ese material como pruebas en el momento de interponer la denuncia.
Desde Podemos, altos cargos como Pablo Iglesias, Pablo Echenique y las ministras Ione Belarra e Irene Montero justificaron las escenas de violencia alegando que había sido Vox quien había «ido a provocar» y que los disturbios comenzaron por parte de los simpatizantes de Vox.