Fin de las vacaciones: ¿Cómo gestionar la ansiedad de volver?

Sabíamos que llegaría el momento y, por fin, ha llegado de verdad; se acabaron las vacaciones : adiós playas, adiós tardes de verano, ¡adiós! . No debemos verlo o sentirlo como algo trágico el año que viene podemos volver y ahora volvemos al trabajo con las pilas más cargadas que nunca. Y, sin embargo, para la mayoría de las personas, puede que sea algo que realmente se les haga cuesta arriba. Y, de hecho, hay personas que se deprimen al llegar el mes de septiembre. Por este motivo, queremos hablaros ahora del fin de las vacaciones y cómo gestionar la ansiedad de volver.

Gestionar la ansiedad tras las vacaciones

No es que se trate de una verdadera depresión, por supuesto, pero los síntomas pueden ser muy similares: tristeza, ansiedad, apatía, por no hablar de los picos de estrés. Pero ¿cómo, el estrés? ¿No hemos descansado precisamente durante las vacaciones para no tener estrés? No te preocupes: estas sensaciones desagradables pasan por sí solas en unos pocos días. No es nada raro: una de cada dos personas lo padece en cuanto tiene que dejar los días de relax por días de madrugones, rutina diaria y sobre todo…trabajo.

Las sensaciones que experimentas, que decíamos que son efímeras, desaparecerán en poco tiempo y se deben a que tu cerebro está tratando de acostumbrarse al ritmo normal, que no siempre es fácil.

Sin embargo, podemos intentar ayudarte en esta ardua tarea : antes que nada, siempre es bueno permitirse un par de días libres o momentos en los que tenga tiempo para ti. Es decir, evitemos volver al trabajo al día siguiente de volver. También nos ayudará a acostumbrarnos a los espacios (y a la idea de volver a ellos). Inicialmente, tienes que hacer las tareas más simples y poco a poco ir preparando todo antes de encarar la rutina de golpe.

Y como decimos, regálate un poco más de mimos, para prolongar un poco más el “efecto vacaciones”: tu película favorita, tu canción en los auriculares, tu bar favorito. ¿Quién dijo que la vida en la ciudad tiene que ser mala?

Busca eventos en tu ciudad y planifica nuevos propósitos. Tener objetivos que te gusten realmente podría ponerte de vuelta en el mundo y ayudarte a retomar el rumbo ; podrías decidir volver a escribir en el gimnasio, llevar un diario o encontrar un nuevo trabajo. Sumérgete en el ambiente otoñal: sí, se acabó el verano, pero ¿por qué quitarle la belleza a la estación que viene, que también tiene cosas buenas?.