OKEntrevista

El jefe de la escuela de Begoña Gómez: «No le pedimos Selectividad y la matrícula eran 50.000 pesetas»

José Luis Maldonado: "Era un título privado, no homologado por el Ministerio de Educación"

"Me reservo mi opinión sobre que Begoña Gómez hace negocios desde el Palacio de La Moncloa"

Vea aquí la entrevista completa

Ver vídeo

José Luis Maldonado, director de la Escuela de Marketing y Negocios donde estudió Begoña Gómez, ofrece una entrevista en la que dice que se enteró por OKDIARIO de que la mujer de Pedro Sánchez había pasado por su centro docente ideado para personas que no conseguían superar la Selectividad. Explica que prefiere no comentar las informaciones sobre que Gómez hace negocios gracias a ser pareja del presidente del Gobierno y eso se investiga por tráfico de influencias: «¿Que qué le diría? Que le vaya bonito, no sé si le quedará mucho tiempo en La Moncloa».

PREGUNTA.- ¿Cómo es su trayectoria?

RESPUESTA.- Me he dedicado fundamentalmente al márketing. Cuando el marketing aquí en España no era mi asignatura, me especialicé con un profesor en Italia. Mi carrera original es en Icade, en Derecho y Empresariales. Soy de la segunda promoción. He estado compaginando mi actividad profesional en temas comerciales con la docencia. Daba clases y participé en la creación de los programas máster del ESIC. Había mucha demanda y eso me hizo montar la Escuela Superior de Marketing y Negocios M&B (Marketing and Business). Yo me inspiré en escuelas europeas, más avanzadas que las españolas. Estuvo abierta 10 años y pasaron 4.000 alumnos.

P.- ¿Cómo se entera de que Begoña Gómez ha cursado en su escuela? 

R.- A mí me llega por OKDIARIO. Me salió en mi móvil o algún amigo lo recibe y me lo envía. Entonces lo primero que hago es intentar hacer memoria. Lamentablemente, no tengo el menor recuerdo de esta señora.  Parece ser que sí que estudió en la escuela porque ella lo dice y aparece en la orla. Pero yo de ella no tengo el menor recuerdo. No puedo añadir nada, ni para bien, ni para mal.

P.- Ella pone en sus currículums que le disteis una licenciatura. ¿Es inexacto?

R.- Sin ofender a nadie, se puede decir que era un título privado. Hasta los acuerdos de Bolonia, las universidades, además de los títulos oficiales que aprobados por el ministerio, las universidades tenían patente de corso para dar títulos privados. Aunque nosotros no teníamos detrás ninguna universidad, cualquiera podía dar un título privado, o a lo sumo, una licenciatura privada no oficial, no homologada.

P.- ¿Qué características tenía su escuela?

R.- Una innovación es pasar los exámenes de recuperación de septiembre a julio. Comprobé que en Holanda, los exámenes extraordinarios los hacían casi a continuación de los ordinarios. Así conseguíamos que el alumno pudiese rematar sus conocimientos todavía en caliente y tener un verano libre. Ahora es el pan de cada día. Pero entonces era una auténtica novedad.

P.- ¿No se exigía tener la Selectividad?

R.- En aquella época el acceso a la universidad era muy difícil, había muy pocas universidades. El ministerio ponía muchas trabas. Mucha gente se quedaba sin poder estudiar. Entendimos que era un capital humano que podía ser aprovechable. Siguiendo a otras instituciones no lo pedíamos. Algunos alumnos traían Selectividad y otros no. Como no lo exigíamos, no lo registrábamos. En paralelo, se propició nuevas universidades privadas y, así, niveles de selectividad más bajos. Ahora todo el mundo aprueba. No exigirlo era una facilidad importante en aquella época, sobre todo para los que no la tenían. Por otra parte, recuerdo que a los alumnos que no podían pagar los precios se les ofrecía becas. Eran unas 50.000 pesetas de matrícula (300 euros) y luego entre 200 y 300 euros al mes de tasas.

CV de Begoña Gómez donde dice que estudió 5 años en ESIC sin ser así.

P.- ¿Eran muy importantes los acuerdos internacionales?

R.- Sí, dábamos la posibilidad de hacer un máster en el extranjero. Teníamos acuerdos con una universidad de Stirling (Escocia), donde los alumnos podían hacer el cuarto curso y así tener dos títulos, y en la Florida International University. Ahí hacían un máster en marketing internacional, que yo mismo diseñé.

P.- Por tanto, ¿era un título oficial y homologado en España?

R.- No. Era un título privado. Eso es así. Si tú justificabas lo que habías estudiado, te lo admitían en otras escuelas privadas y conseguías hacer un máster. Pero no era oficial. Era un título superior porque eran cuatro años por encima del Bachillerato.

P.- Begoña Gómez dice que su «licenciatura» es por ESIC. ¿Vuestro título tenía ligazón con ESIC?

R.- Yo tenía mucha relación con ESIC, pero ese título superior lo daba M&B. ESIC ni lo homologaba, ni nada. Los títulos de ESIC eran como los nuestros. Tras Bolonia, los másteres solamente los pueden dar universidades. Ellos ahora están adscritos a la Universidad Rey Juan Carlos.

P.- ¿En su escuela era importante la puntualidad y vestir formal?

R.- Esas innovaciones venían de lo que yo había visto en Europa. La puntualidad es un asunto muy importante en esta vida, más en temas comerciales. Los profesores cerraban la puerta del aula con un pestillo. No se permitía el acceso a los alumnos si llegaban tarde. Además, los alumnos en verano no podían venir en bermudas. En las presentaciones en clase iban de chaqueta y corbata, como sería en la vida profesional. En las graduaciones les obligábamos a ir de smoking. Si no tenían, lo alquilaban.

P.- ¿Qué le parecen los negocios que hace Begoña Gómez desde La Moncloa?

R.-  Mire, modestamente me voy a reservar la opinión. Vengo aquí por porque me habéis caído muy bien. Y sobre todo por alusiones, porque me habéis citado y quiero corregir algunas confusiones que había en esa época. Pero en otros temas me reservo la opinión. Espero que lo entiendas y lo comprendas.

P.- ¿Qué le diría hoy a Begoña Gómez años después de ser el director de su escuela, hoy que está en La Moncloa?

R.- No sé si va a estar mucho más tiempo allí, en de La Moncloa. Lo que sí le diría es que me alegro de que haya estudiado en M&B y que lo esgrima porque los conocimientos que adquirió eran suficientes. Me alegro de los másteres que ha hecho después y le deseo que le vaya bonito.

P.- Muchas gracias por su visita. ¿Ahora se dedica a ser escritor?

R.- Gracias a vosotros. Sí, he traído este libro Historias seleccionadas, porque quería corresponder vuestras atenciones. He sido muy aficionado a la historia. Llegué a tener más de 4.000 libros. He escrito, aparte de algún libro de marketing, libros de temas históricos, seis o siete. Procuro ser ameno porque si no, pasa como en las matemáticas, muchos datos, mucha enjundia, pero no es atractivo y repeles al personal. Pretendo que la gente conozca la historia. Como recuerdo a los alumnos, hay que recoger la historia de España, porque de su buen conocimiento puede depender el futuro.

Lo último en Investigación

Últimas noticias