El truco casero para evitar que se vuele el mantel en estas comidas al aire libre

Una de las actividades preferidas de muchos durante el verano son las comidas al aire libre, ya que permiten ver a los amigos y seres queridos, disfrutar de una sabrosa comida y, de paso, escaparse de las altas temperaturas que hacen imposible estar en casa. Sin embargo, estas reuniones suelen provocar algunos problemas. Te contamos el truco casero para evitar que se vuele el mantel en estas comidas al aire libre.

Uno de los principales es que probablemente queramos colocar un mantel por debajo de la comida y las bebidas. Éste evitará que esa mesa improvisada entre en contacto con los alimentos.

El inconveniente es que la mayoría de los manteles tienden a volar, lo que hace que apoyar algo encima de ellos acabe resultando peligroso, porque nunca podemos estar 100% seguros de que algún vaso con bebida no se caiga, arruinando el banquete que con tanto cuidado habíamos preparado.

El truco casero para evitar que vuele el mantel

Afortunadamente, hay personas con una capacidad de improvisación loable que comparten en las redes sociales sus trucos para que los manteles no se vuelen. Es el caso del usuario de Instagram @mimodemami, que ofreció una solución muy interesante, consistente en crear una especie de puntas fijas en cada esquina del mantel.

Y todo lo que necesitas para poder replicar esto en tu casa es una perforadora de papel, de esas que producen pequeños agujeros, y una cinta que puede ser del material y color que más te guste, aunque recomendamos aquellos que sean resistentes, y que combinen perfectamente con el tono del mantel.

Con todas las herramientas y elementos a disposición, extiende tu mantel sobre una mesa haciendo que sobren unos 20 centímetros de largo y de ancho. Crea los dos pliegues por cada esquina y, mientras los sujetas juntos, utiliza la perforadora para generar los agujeros. Serán dos en total, cuatro si los multiplicamos por los pliegues.

Tendrás entonces dos pliegues por esquina, cada uno con dos agujeros, por los cuales tienes que pasar la cinta. Creemos que lo mejor es que la pases cruzada, como en las zapatillas, para sujetar con fuerza las esquinas.

Al hacerlo con cada una de las esquinas del mantel, éste tendrá la forma de una mesa independientemente de dónde esté apoyado, por lo que esas puntas rebeldes de todo mantel dejarán de amenazar con derramar tu líquido al comer.