Verano

Cómo limpiar correctamente una sombrilla de playa

Cómo limpiar correctamente una sombrilla de playa
Cómo limpiar correctamente una sombrilla de playa

La sombrilla es uno de esos objetos que forman parte del día a día durante el verano. Pero a medida que la estación estival transcurre hay que planear la vuelta a la rutina, y tenemos que limpiar este accesorio para dejarlo guardado de cara a la próxima temporada. Cómo limpiar correctamente una sombrilla de playa.

Si te preguntas cómo guardar tu sombrilla para que esté impecable en el verano de 2023, evitando tener que comprar otra nueva en unos pocos meses, lo mejor es almacenarla bien resguardada de factores climáticos a los que suele estar expuesta, como el viento o el sol.

Limpiar correctamente una sombrilla de playa

Pero como parte del mantenimiento previo a despedirse de ella por un tiempo, la limpieza es sumamente importante. No debes descuidarla, ya que sólo eso nos asegura que conserve un buen estado y pueda cumplir su función si la necesitamos.

Lo primero que debes analizar es si tu modelo de sombrilla permite quitarle la cubierta o tela separándola del «esqueleto» en minutos. Las que permiten hacerlo facilitan enormemente el lavado porque no se choca con esa estructura.

Básicamente, si puedes quitarla sólo tienes que seguir las instrucciones que da el fabricante. Generalmente esto consiste en desmontar la tela y lavarla con agua fría y algún jabón neutro. Y recomendamos no usar secadora, ya que el aire caliente puede llegar a dañar la tela.

Ante el supuesto de que la tela no pueda separarse de la estructura, debes buscar algún lugar espacioso y abrirla todo lo posible, lavándola con una mezcla de agua tibia con jabón. Antes de mojarla intenta retirar el polvo que haya acumulado con un trapo que esté 100% limpio.

Acto seguido coge un cepillo y frota con fuerza toda la superficie, especialmente en los pliegues de la tela donde se acumula la mugre. Posteriormente pasa otra vez el trapo húmedo para retirar restos de jabón neutro y suciedad.

Para el secado se aconseja dejarla en otro sitio donde le dé el sol de forma directa hasta que esté completamente lista para guardarla. Es fundamental que no la olvides bajo los rayos solares porque la exposición prolongada al mismo puede estropear la tela.

Por último, si tienes una sombrilla de plástico y no de tela bastará con que pases un trapo húmedo por toda la superficie hasta que quede completamente limpia.

Independientemente de los materiales, recuerda que es clave no guardar la sombrilla sucia porque tanto la arena como otras suciedades típicas de la playa la estropearán mientras está guardada y sin que te des cuenta.

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