Belén Esteban responde a las preguntas de ‘La Resistencia’ (sin ir allí): «Mamá, baja la tele»

Pese a que las audiencias no están siendo las mejores en los últimos días, los colaboradores de Ni que fuéramos están dejando grandes momentos desde su salto a Ten TV. Belén Esteban ha sorprendido a los espectadores al contar sus secretos sexuales respondiendo a las preguntas clásicas de La Resistencia sin necesidad de tener que acudir al plató de Broncano.

Todo ha comenzado gracias a que han querido repasar la entrevista a Amaia Romero en el programa de Movistar Plus+, aunque uno de los motivos era recordar sus palabras sobre lo que ha tenido que pagar a Hacienda. Pese a que el tema monetario era interesante, pronto la conversación ha llevado hacia lo sexual, subiendo la temperatura de la tarde.

Ha sido María Patiño la culpable de sacar el tema al comenzar a preguntar a Víctor Sandoval por el dinero que tiene en el banco y los temas relacionados con el sexo, pero pronto ha querido saber sobre su compañera Belén. Pese a que conoce las preguntas después de haber ido dos veces al programa de Broncano, se hacía la despistada al asegurar que no puntuaba sus relaciones.

Inmediatamente ha sido Kiko Matamoros el que ha sacado papel y boli para explicarle con detalle los puntos que debería sumar por cada relación sexual, masturbación o petting de los últimos 30 días. «Yo hago el amor», se ha apresurado a decir, pero hasta que no ha contestado no han parado sus compañeros.

Tras decir que siete veces en el último mes le parecía poco, todos se han sorprendido y le han advertido de que «no valen faroles». En ese momento ha decidido hablar claro: «Mi vida sexual está plena», ha anunciado antes de pedir a su madre algo: «Mamá, por favor, baja la tele».

Responden a la pregunta de La Resistencia de cuantas veces 👌🏽👈🏽 al mes.

Kiko: fornicar un punto
Belén: yo hago el amor
María: pero cuantas veces?
Belén: mamá baja la tele

Y PROCEDE A CONTAR QUE ✨ SE VA ✨ TRES VECES POR POLVO, NO PUEDO JAJAJAJAJAJAJAJAJ#NiQueFuéramos13J pic.twitter.com/nY6Lt5mnSZ

— alitta (@RcPorta_) June 13, 2024

«Hay días que no lo contaría como uno, que lo contaría como tres», ha confesado ante las risas de toda la mesa. Kiko ha querido saber si su compañera es multiorgásmica, pero en realidad se trata de que «el placer es tan grande que los cuenta como si fueran tres».

Pese a que le pedían que hiciese las cuentas con mayor detalle, La Patrona -como ahora quiere que la llamen- ha pedido que pusieran el aire acondicionado, algo a lo que también se ha sumado Patiño. En ese momento las miradas se han ido hacia el marido de Marta López Álamo, del que se esperaban grandes números.

Hay que recordar que hace unos días disfruto de un crucero para celebrar su aniversario de boda, algo que no ayudó a sumar puntos. «La verdad que este mes… porque en el barco era la cama tan incómoda, porque yo estoy acostumbrado a mi cama», se justificaba antes de explicar que «en el barco un par de veces» nada más.

Patiño ha querido explicar «no es de cama para nada» en estos asuntos y que la prefiere usar para dormir, pero Kiko ha explicado que para él sí es más cómoda porque le gusta «algo más que hacer el amor». Tras contar sus intimidades ha ido directo a por Chelo García-Cortés, que hasta ese momento estaba muda por completo.

A la periodista le ha querido preguntar qué hace en los días que pasa separada de Marta, su esposa, con la que vive en la localidad de Casteldefels. «¿Tú practicas la masturbación cuando estás fuera de casa?», ha preguntado muy directo ante la cara seria de la periodista.

Tras intentar salir sin contestar sobre cuántas veces se masturba o cuántas relaciones tiene con su pareja, la pregunta que le ha provocado más indignación es si su perrita Maggie está delante cuando lo hacen. Mientras Belén Esteban y el resto no daban crédito a lo que estaba pasando, Matamoros ha vuelto a dar un nueva vuelta de tuerca a la conversación y ha querido advertir a los espectadores de que no tengan relaciones ante sus mascotas porque es posible que los animales puedan atacar al interpretar que se está produciendo un ataque hacia su amo.