Goleada absoluta

España ganó el partido más extraño de su historia. Durante la centenaria vida del equipo nacional se han disputado 715 encuentros. Los ha habido de todo tipo: amistosos, oficiales, goleadas, humillaciones… pero ninguno como el disputado este martes ante Lituania. Jugadores de vacaciones convocados con apenas unas horas de antelación, un único entrenamiento previo, diez debutantes en el once titular y un seleccionador que se estrenaba en el banquillo. Pero si hablamos de estrenos lo hacía hasta el estadio de Butarque, que también acogía su primer partido absoluto de España. Y todo ello mientras los futbolistas que tendrían que estar en el césped lo veían por la tele en sus habitaciones del hotel de la Ciudad del Fútbol de Las Rozas confinados con el único pensamiento de seguir sacando resultados negativos en los test PCR que se van a realizar hasta el comienzo de la Eurocopa.

Porque si este partido era extraño, lo era también porque los jugadores que han disputado un choque de preparación para la Eurocopa no la van a jugar (o eso parece). Otra cosa sea que sirva para los JJOO, porque muchos de ellos serán los encargados de representar a España en Tokio… aunque tampoco todos. Y era extraño porque mientras Sergio Ramos, el jugador con más internacionalidades de la historia (180) estaba en su casa sin convocar, el brazalete lo portaba un Cucurella que estaba debutando con España.

🚨 OFICIAL | ¡¡YA TENEMOS EL ONCE TITULAR!!

👥 Estos son los jugadores elegidos por Luis de la Fuente para saltar de inicio al césped de Butarque.

¡¡A por la victoria, equipo!! 💪🏻#SomosEspaña pic.twitter.com/1KQlZy03uE

— Selección Española de Fútbol (@SeFutbol) June 8, 2021

Dicho esto, toca ponerse en pie para aplaudir a los chicos y al seleccionador en funciones, Luis de la Fuente, que recién aterrizado en su Haro natal desde Eslovenia no dudó, tras recibir la llamada de la RFEF en hacer las maletas y poner rumbo a Madrid a sabiendas de perderse las fiestas de una fecha tan señalada para él como el día de La Rioja. Pero nada era más importante ni le generaba tanto orgullo como representar y defender los colores de España. Así que con los informes de Lituania preparados por el equipo de Luis Enrique bajo el brazo, preparó una convocatoria rápida y «a ganar».

Gol a los 158 segundos

Y con esa intención salió España desde el comienzo. En apenas dos minutos y sin que Lituania oliese el balón, los jugadores españoles rozaban en dos ocasiones el gol. Primero por un disparo de Abel Ruiz. Después con otro intento de Bryan Gil que acababa en un córner que iba a acabar en el tanto de Guillamón tras una buena jugada de Manu García. Apenas 158 segundos necesitó el futbolista del Valencia para dejar su nombre en la historia.

El partido era controlado de manera absoluta por una España, que ante su poderío generaba una pregunta sarcástica: ¿por qué no convoca Luis Enrique a estos jugadores para la Eurocopa? La realidad es que daba gusto ver jugar a los Zubimendi, Villar, Brahim y compañía. Y el segundo gol no tardó en caer. Fue precisamente este último, el madridista cedido en el Milan, con un disparo cruzado dentro del área, el que batía a un Svedkauskas que minutos después evitaba el tercero parando un penalti a Abel Ruiz.

Tras el descanso, el partido siguió el mismo guión. De la Fuente daba entrada a Pozo y a Miranda, que iba a anotar el tercero con un gran lanzamiento de falta. El golpeo del futbolista del Betis saltó la barrera y cuando el meta lituano quiso llegar el balón ya estaba en la red. España no podía estar más a gusto en un partido en el que primero Álvaro Fernández y después Josep Martínez eran meros espectadores desde la portería.

Aún había tiempo para más. Esta vez iba a ser el jugador del Espanyol Javi Puado el que iba a marcar el cuarto para cerrar la goleada en un partido en el que los improvisados jugadores de la Selección pasaron el test mientras dejaban un mensaje para el presente y el futuro: «Aquí estamos».