En Lanzarote y Doñana

Vacaciones ‘reales’ de Sánchez en pleno rebrote: 3 semanas de relax con paso por el Palacio de La Mareta

La Mareta fue un regalo del rey Hussein II de Jordania a Juan Carlos I en 1989

En 2015, y por deseo expreso de Felipe VI, la Residencia Real se puso a disposición del Gobierno

Pedro Sánchez llega a Lanzarote en ‘Falcon’ (cómo no) con perra incluida

Ver vídeo
Luz Sela
  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

Ni los rebrotes del coronavirus alteran los planes vacacionales de Pedro Sánchez. En plena segunda ola, con los contagios disparados ya en varias comunidades autónomas y sin un plan del Gobierno para hacerles frente, el presidente socialista tiene varios días de descanso por delante. En concreto, Sánchez se desplazará con su familia a la finca de La Mareta, en Lanzarote, tras celebrar el último Consejo de Ministros ordinario antes de las vacaciones, el próximo 4 de agosto.

Allí, según ha podido saber OKDIARIO, el socialista, junto a su mujer Begoña Gómez y sus hijas, permanecerá durante una semana. Después, su intención es pasar unos días en Las Marismillas, en Doñana, otro de sus destinos habituales. Está previsto que Sánchez se incorpore a la actividad ya avanzado el mes de agosto, ya que hasta el día 25 no tendrá lugar el primer Consejo de Ministros tras el parón vacacional. Si nada lo impide, sólo interrumpirá su descanso para el tradicional despacho veraniego con el Rey.

Regalo a Don Juan Carlos 

Pedro Sánchez vuelve a elegir el Palacio de La Mareta para sus vacaciones, confirmándolo así como uno de sus destinos favoritos.

Lo hace además en plena polémica por las revelaciones de OKDIARIO sobre el Rey Emérito. Y es que esta finca guarda una especial vinculación con Don Juan Carlos, ya que fue un regalo directo del rey Hussein II de Jordania al padre del Rey en 1989. En 2015, y por deseo expreso de Felipe VI, la Residencia Real se puso a disposición del Gobierno, pero con un fin: la promoción y la defensa de los intereses turísticos del país. No obstante, Sánchez acostumbra a hacer uso de este palacio de forma estrictamente personal. 

La familia del presidente socialista disfrutará así de una extensa finca, de 30.900 metros, diseñada y decorada por el artista César Manrique, y con acceso directo al mar.

El complejo lo integran diez bungalows, de una y dos plantas de altura, el principal, con dos dormitorios, piscina y distintas terrazas. Además, cuenta con gimnasio, otras dos piscinas, pista de tenis, cancha de baloncesto y una amplia zona ajardinada de 10.000 metros cuadrados. El palacio reproduce la arquitectura tradicional de las islas Canarias, de estilo colonial, con paredes blancas y numerosos balcones.

Posteriormente, Sánchez se desplazará a Doñana, otra de las fincas que utiliza para relajarse.

Sin plan para el Covid

Pese a la alerta sanitaria y la situación crítica que atraviesan varias comunidades, especialmente Aragón y Cataluña, Pedro Sánchez no altera sus planes.

La propagación del virus confirma que el Gobierno no dispone de un plan eficaz para hacer frente a los rebrotes. Tras el fin del estado de alarma, el Ejecutivo ha relegado toda la responsabilidad en las comunidades autónomas, y ha mantenido un papel pasivo en la gestión de la crisis.

Pese a que hace unos días la portavoz técnica del Ministerio de Sanidad, María José Sierra, no descartó que estuviésemos ya en una segunda ola de la pandemia, el Gobierno insiste en negar este extremo. Pese a los casos, que se multiplican, el Ejecutivo persigue trasladar un mensaje de tranquilidad, incluso con argumentos sorprendentes como «Hay rebrotes porque tiene que haberlos», como expresó recientemente la vicepresidenta primera Carmen Calvo.

En cuestión está, por ejemplo, el protocolo para evitar la entrada del Covid por aeropuertos, o para hacer frente a la expansión de contagios por la masiva llegada de la inmigración ilegal.

Pese a ello, y ya pensando en vacaciones, Pedro Sánchez exhibe un aire triunfal. Este miércoles, en el Congreso, el socialista ha celebrado el fracaso del acuerdo europeo para la activación económica por la pandemia. El presidente del Gobierno ha destacado el «protagonismo» de España en el acuerdo y no ha dudado en enfatizar su ‘sacrificio’ personal por las «cinco jornadas de encierro extenuantes» durante las negociaciones.

Por su parte, el PP sigue exigiendo un plan eficaz para afrontar los rebrotes. El líder de la oposición, Pablo Casado ha denunciado el «triunfalismo» del jefe del Ejecutivo que, ha considerado, vive en una «realidad paralela» porque «no hay nada que aplaudir» con la «situación preocupante» provocada por los rebrotes, la pérdida de más de 42.200 «compatriotas por el virus» y «siete millones españoles que quieren trabajar y no pueden».

Casado ha reiterado su plan alternativo para hacer frente a la propagación de la pandemia y reactivar la economía golpeada por la crisis.

El parón vacacional del Gobierno complica una respuesta urgente en caso de que la situación se desborde aún más. El único plan sería, llegado el momento, decretar de nuevo el estado de alarma, aunque el Ejecutivo no está aún en ese escenario. En plena pandemia, se anunció desde Moncloa la intención de emprender ciertas reformas legislativas para responder a las oleadas pandémicas. No se ha hecho nada.

Entre tanto, la pandemia avanza. Sanidad notificó este martes 905 nuevos contagios lo que acerca de nuevo la cifra al millar de infectados diarios. 23.147 personas han sido diagnosticadas en las últimas dos semanas.

Lo último en España

Últimas noticias