Trump recibe a los Reyes en la Casa Blanca y les anuncia que viajará a España
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha afirmado este martes ante el Rey Felipe VI que viajará a España, en el encuentro que ambos han mantenido en el Despacho Oval y tras destacar las «excelentes» relaciones entre los dos países.
«Nuestra relación ha sido sobresaliente a lo largo de los años y, creo, especialmente ahora. Unas relaciones comerciales y militares excelentes. Todo lo que se puede tener, así que nos encanta España y es realmente un tremendo honor tenerlos aquí», ha dicho Trump.
Trump ha elogiado España como «un lugar hermoso» con «una gente muy especial» donde ha viajado hace no mucho, según las imágenes que han difundido las televisiones.
El Rey, por su parte, ha subrayado que la reunión en la Casa Blanca es un «gran final» para una «visita perfecta» que ha servido para poner en valor la herencia española en Estados Unidos, en particular en Texas y en Luisiana y las «excelentes relaciones» de hoy en día.
La visita coincide también con el 30 aniversario del Convenio de Cooperación para la Defensa entre España y Estados Unidos, que permite el uso compartido de las bases de Rota (Cádiz) y Morón de la Frontera (Sevilla) y al que Estados Unidos concede mucha importancia.
De hecho, ha destacado que los dos países tienen «muchos asuntos de interés común», y especialmente el valor que ambos conceden a la democracia y el trabajo que desempeñan en muchas áreas del mundo. «Es verdad», ha acotado Trump, según la transcripción difundida por la Casa Blanca.
Historia común
En unas breves palabras pronunciadas en inglés, Felipe VI ha dicho valorar mucho la historia común de España y Estados Unidos y la ha considerado un indicador de la buena relación que tienen hoy los dos países.
El Rey y Donald Trump, que celebran su primer encuentro, se han saludado así ante una nube de periodistas, flanqueados por la primera dama, Melania Trump, y la Reina Letizia, sentadas a su lado en los sofás del despacho oval. El programa oficial prevé que ambas tomen el té mientras se produce la reunión de trabajo entre las dos delegaciones. Los Reyes han viajado acompañados del nuevo ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Josep Borrell.
Donald y Melania Trump han recibido a los Reyes en la fachada sur de la Casa Blanca y han posado brevemente para los fotógrafos, ante la entrada flanqueada con las banderas de España y de Estados Unidos, antes de dirigirse al despacho oval.
La cita en la Casa Blanca pone el broche final a una gira en la que los Reyes han reivindicado el legado español en la historia de Estados Unidos con motivo del 300 aniversario de las ciudades de Nueva Orleans (Luisiana) y San Antonio (Texas).
La visita de los Reyes se produce en un momento de distanciamiento entre la Unión Europea y los Estados Unidos por las políticas proteccionistas de Trump, en particular con el aluminio y el acero. En España preocupan, además, los aranceles que afectan a la exportación de la aceituna negra.
Estados Unidos ratificará su decisión el próximo 24 de julio, día en que está previsto que el Departamento de Comercio de ese país haga público su dictamen final sobre el asunto de las olivas, dado que desde el pasado enero se venían aplicando de manera provisional unos aranceles del 21,6%, lo que ha generado unas pérdidas económicas para el sector de entre 6 y 7 millones de euros.
Antes de acudir al encuentro con Trump, el Rey ha visitado la sede del Banco Mundial, donde se ha reunido con su presidente, Jim Yong Kim,y ha conversado con funcionarios españoles que trabajan en el Banco Mundial. Después se ha reunido con el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Alberto Moreno.
La visita de los Reyes a Washington terminará este martes con una reunión con el presidente de la Cámara de Representantes, Paul David Ryan, y Addison Mitchell McConnell, líder de la mayoría republicana. A continuación, se verá con Nancy Pelosi, líder de la minoría demócrata en la Cámara de Representantes.
El mandatario ha recibido a los Reyes después de un acto en el que ha hecho una nueva defensa de su política migratoria, criticada por gran parte de la comunidad internacional, esgrimiendo que para poder juzgar a los padres por entrar ilegalmente en el país «tienes que quitarles a los niños».
Trump ha asegurado que quiere «solucionar la separación familiar» y ha avanzado que, para «poner fin a esta crisis», pretende dar a las fuerzas de seguridad la autoridad y los recursos necesarios para «detener y deportar a las familias de inmigrantes ilegales juntos».
Además, ha avanzado su intención de «hacer cambios» en «el paquete migratorio» que está en trámite en la Cámara de Representantes. Sin embargo, no ha aclarado a qué proyecto de ley se refiere porque en estos momentos hay dos, uno moderado y otro más radical.