Torra encabezará la manifestación que se jacta del asedio a la Guardia Civil un año después

El primer aniversario del asedio a la consejería de Economía y Hacienda, donde miles de personas imposibilitaron la actuación policial y judicial y por el que los líderes de la ANC y Òmnium Cultural están acusados de sedición, es el punto de partida para que el independentismo tome la calle por órdenes del presidente catalán, un radical e incendiario Quim Torra que ha llamado a la movilización permanente. Todas las organizaciones sociales del separatismo se manifestarán este jueves de nuevo ante la Consejería. Con Torra a la cabeza, por supuesto.

El tablero de juego, respecto al año pasado, ha cambiado. Si hace justo un año eran la ANC y Òmnium, junto con los partidos independentistas, los que dirigían la calle y las movilizaciones, ahora los autodenominados ‘Comités de Defensa de la República’ (CDR) y las redes sociales han tomado el control. Y eso preocupa a las entidades, que no controlan las acciones, y en parte al Govern. Pero no a Torra, que es uno de ellos.

Aunque los CDR y redes sociales van cogidos de la mano, los primeros están mínimamente organizados y lo segundo es esporádico, en respuesta a una acción policial o judicial. Pero ambos son capaces de organizar una movilización numerosa en pocos minutos. Entregados completamente a la causa, están dispuestos a todo. Incluso a las consecuencias penales, algo que quieren evitar ANC, Òmnium y los partidos separatistas.

Los CDR serían lo más similar a una asociación de vecinos. Se apunta todo el que quiere, celebran sus asambleas en el espacio público y se organizan para llevarlas a cabo. Los forman gente muy distinta, desde jóvenes radicales al entorno de la CUP —que en cierta manera controla los CDR, muy críticos con el Govern— hasta ex afiliados socialistas que superan los 70 años. A diferencia de la ANC y Òmnium, los CDR se movilizan también contra la «inacción» del Ejecutivo de Torra. Son rápidos y con mucha capacidad de reacción.

Como las redes sociales. Twitter y Telegram se han convertido en los canales preferidos por el separatismo para convocar concentraciones espontáneas y urgentes contra una actuación policial o una decisión judicial. Como los CDR, mayoritariamente llevan a cabo sus acciones sin pedir permiso, y es difícil buscar a un responsable de la actividad.

La ANC, Òmnium y los partidos secesionistas, por su parte, van un paso por detrás. A día de hoy, controlan únicamente la movilización de la Diada del 11 de septiembre, pero su capacidad de movilización es menguante respeto a la de los CDR. No quieren más problemas con la Justicia, y aunque alardean diariamente de desobedecer y plantar cara, miden cada una de sus acciones para no ser judicializados. Ambas entidades tienen procesos abiertos, que podrían acabar con su suspensión como organizaciones. El juicio del 1-O, podría hacer saltar por los aires ese carácter pacificador que han adoptado en los últimos meses. Al fin y al cabo, la gran mayoría de sus socios son también CDR.

A todo ello, cabe recordar que el Govern actual es el primero en animar a los independentistas a salir a la calle y movilizarse permanentemente, poniendo en duda la actuación de la Justicia y dificultando cualquier dispositivo policial. Hace unos días, un diputado de ERC en el Congreso señaló públicamente los hoteles donde se alojaban los agentes destinados a reforzar la Policía y la Guardia Civil en Cataluña.

Entre todos estos actores, en los próximos días revolucionarán las calles catalanas. Este jueves 20 de septiembre, cuando se cumple un año del asedio, Òmnium y la ANC han convocado frente a la sede de la consejería de Economía para cortar la Gran Vía. Las dos entidades también liderarán la movilización del 1-O junto al Govern y los CDR —que avanzarán el inicio de las movilizaciones al día 30— y la del primer aniversario del encarcelamiento de sus líderes, el 16 de octubre.

El 29 de septiembre, las juventudes de la CUP —ARRAN— y los CDR planean boicotear la manifestación de Jusapol con agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil en Plaza Sant Jaume para rememorar su labor a favor de la ley y la unidad de España el pasado 1 de octubre. Mientras los CDR llaman a volver a ocupar la plaza como este domingo, ARRAN ha comprado varios kilos de pintura en polvo para hacer un «Holi Festival» y «ahogar en pintura» a los agentes de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.