Los socios de Sánchez no ven suficiente corrupción para dejarle caer porque «la alternativa son PP y Vox»
Voces del PSOE y socios se inclinan por creer que habrá elecciones en 2026

La nueva «bomba» que ha caído en el seno del Gobierno tras conocerse que su ex secretario de Organización, Santos Cerdán, cobró supuestamente mordidas del 2% de las contrataciones de obra pública a Acciona y que su mujer, Francisca Muñoz Paqui, y él mismo gastaban grandes cantidades de dinero procedente, presuntamente, de esas comisiones, no ha logrado quebrar por ahora la voluntad de apoyo de los socios de Pedro Sánchez que, visiblemente contrariados, admiten que, todo este «derroche documental» les «huele mal», pero si dejan caer al Ejecutivo «la alternativa son PP y Vox».
Fuentes de las formaciones que siguen prestando su apoyo al Gobierno, a pesar de las noticias de comisiones y mordidas que afectan a quienes fueron miembros del Gobierno y el PSOE de Pedro Sánchez, se muestran preocupadas ante el incesante goteo de informaciones sobre la supuesta corrupción que cerca al PSOE y admiten que solamente siguen en su apoyo numantino al Ejecutivo porque quieren evitar a toda costa «la llegada de PP y Vox a la Moncloa».
Sin embargo, estas mismas fuentes aseguran que «si esto sigue así, tendremos que forzar ir a elecciones». Todos los consultados se inclinan por augurar el adelanto electoral al año 2026, a pesar de la insistencia de Sánchez en negarlo y mantener 2027 como la fecha en la que se celebrarán los comicios.
De hecho, dentro del propio PSOE son varios los consultados que se inclinan por creer que la legislatura no va a ir más allá de 2026, aunque Sánchez diga lo contrario, «por pura estrategia». Algunas voces socialistas aseguran en privado que «la presión es insoportable», mientras que otros creen perfectamente capaz de soportar la presión a su jefe de filas, Pedro Sánchez, pero temen que sean los socios parlamentarios quienes no la resistan.
Una «ventana de oportunidad»
Otras fuentes socialistas aseguran que Sánchez está buscando una «ventana de oportunidad» que le muestre el mejor momento político para convocar elecciones generales, entendido como «el mejor momento político para el PSOE» y para el propio Pedro Sánchez y sus expectativas y entienden que los próximos comicios en Extremadura y Castilla y León, o incluso en Andalucía «serán un banco de pruebas» para Sánchez y le ayudarán a decidir cuándo pondrá fin a la presente legislatura, la XV.
Oficialmente y de viva voz, el único político socialista en activo que se ha atrevido a contradecir a Sánchez es el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien no solo está convencido de que las elecciones generales serán en 2026, sino que clama por que se celebren antes que las municipales y autonómicas de 2027, para evitar que se repita lo que ocurrió en 2023 cuando, a su juicio, el PSOE «se hundió en ayuntamientos y Comunidades Autónomas por la política nacional».