El mantero de Podemos pide a la juez cerrar su causa por injurias tras acusar a la Policía de asesinos
La Confederación Española de Policía (CEP) presenta alegaciones para que continúe el procedimiento

Serigne Mbayé, el mantero de Podemos que fue diputado en la Asamblea de Madrid, pide a la juez cerrar su causa por injurias tras acusar a los agentes de la Policía Nacional de asesinos. Así consta en un escrito en el que la defensa de Serigne Mbayé pide el archivo del procedimiento y sobre el que la Confederación Española de Policía (CEP) —cuya querella dio origen al procedimiento— ha presentado alegaciones.
Serigne Mbayé ha sido imputado por un delito de injurias tras pronunciar un discurso en el que acusaba a la Policía de brutalidad, racismo e incluso les llamaba asesinos. Su defensa ha pedido el archivo del procedimiento argumentando que hay una «inexistencia de hecho delictivo».
El abogado de Serigne Mbayé expone en el escrito en posesión de OKDIARIO que su discurso aludía a las detenciones en Lavapiés del 29 de marzo de 2024, a la tragedia de Melilla, a la crítica por la actuación del ministro del Interior y la vigencia de la Ley Mordaza. Explica que Mbayé «tenía derecho a la libertad de expresión sobre el interés público del debate».
Y prosigue: «Los mensajes difundidos por mi representado suponen la expresión de una posición respecto de la política general en materia de inmigración y extranjería, una crítica legítima a la actuación de los funcionarios integrantes del cuerpo de policía así como la referencia a la persecución y al hostigamiento policial hacia un colectivo, como lo es el migrante y racializado».
Los policías en contra
El sindicato CEP se ha opuesto al archivo que pide el mantero de Podemos. Según un escrito de alegaciones, al que ha tenido acceso OKDIARIO, aseguran que se ha acreditado tanto en la querella como en la declaración del investigado ante el juez que fue Serigne Mbayé el que pronunció estas palabras.
«Vincula a la Policía Nacional con delitos muy graves como el asesinato, torturas, brutalidad policial, acoso y racismo, todo ello realizado con publicidad y con una amplia repercusión en redes sociales y medios de comunicación», exponen los sindicalistas del CEP.
En el procedimiento judicial se pueden ver los vídeos en los que pronunció estas palabras.
Y prosigue: «No critica sólo una determinada actuación policial. Al contrario, y de forma inmediata, escala su discurso y, sin matiz alguno, imputa a toda una institución, la Policía Nacional, en la aplicación en su praxis operativa diaria de conductas brutales violentas».
Serigne Mbayé opina sobre Melilla
Serigne Mbayé también cargó contra los policías asegurando que su actuación no era la misma con personas blancas que con negras, evidenciando un supuesto racismo y sesgo racial en las actuaciones policiales.
Se refirió así a lo ocurrido en un salto a la valla de Melilla: «Todo lo que está pasando, cualquier cosa que pase con una persona negra en este país, siempre termina con que le han matado. ¿Y por qué eso? Lo que pasa con las personas negras nunca pasa con las personas blancas. ¿Cuántas personas han asesinado? ¿Cuál es la excusa? Agresividad».
Según expone la defensa del sindicato policial, Serigne Mbayé obvió un dato fundamental y es que las personas fallecidas en aquel asalto al vallado fronterizo lo fueron en suelo marroquí y no en España.
El 0,005% está condenado
«La Policía Nacional no es un Cuerpo violento, que emplee la brutalidad de forma generalizada en sus intervenciones, como afirma el Serigne Mbayé. Al contrario, y según cifras oficiales aportadas por el Gobierno de España en una pregunta parlamentaria, en un periodo de quince años, entre 1993 y 2016, son sólo 63 los policías nacionales condenados por ese tipo de delitos, lo que supone una media anual de cuatro casos en un colectivo con un volumen de funcionarios medio en torno a los 70.000 efectivos (el 0,005%)», exponen con datos.
Por todo ello, solicitan que el procedimiento por injurias continúe, ya que el mantero de Podemos acusa a un colectivo de 72.000 funcionarios de la comisión masiva, habitual, sistemática y deliberada de prácticas ilícitas como la aplicación de la brutalidad (violencia) o el racismo.
«Falsedades, todas ellas, que afectan al honor e imagen de una institución esencial en nuestro Estado social y democrático de Derecho, a la que nuestra Carta Magna encomienda proteger el libre ejercicio de los derechos y libertades y de garantizar la seguridad ciudadana», zanjan desde el sindicato policial.