Seguridad Nacional tildó el 4-M de “crítico” el control del virus en aeropuertos que hoy sigue sin hacer Sánchez

variante brasileña
Control de viajeros en el aeropuerto de Barajas (Foto: Europa Press)
Carlos Cuesta

Pedro Sánchez, mientras cierra Madrid y un largo listado de municipios de la Comunidad que gobierna Isabel Díaz Ayuso, se sigue negando a implantar los test PCR en los aeropuertos. Lo hace pese a la insistencia del Gobierno autonómico día tras día, y pese a que el informe anual de 2019 del departamento de Seguridad Nacional de la propia Moncloa -aprobado el 4 de marzo de 2020- calificó como «zonas especialmente críticas»en la lucha contra las pandemias «los puertos, los aeropuertos y las fronteras terrestres».

Hoy, un interminable listado de países cierran las puertas a los viajeros españoles, les exigen test PCR o un periodo de cuarentena obligatoria. Pese a todo ello, Sánchez sigue sin querer imponer los controles con PCR en la principal puerta de entrada a España.

El informe del departamento de Seguridad Nacional no escatimó alertas con respecto a este punto al hablar de la ‘Seguridad frente a pandemias y epidemias’. El texto incluye el siguiente párrafo: «El desafío para detectar y reaccionar ante cualquier riesgo sanitario es particularmente sensible en infraestructuras y zonas especialmente críticas como son los puertos, los aeropuertos y las fronteras terrestres».

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Informe de Seguridad Nacional aprobado el 4 marzo de 2020.

 

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Informe de Seguridad Nacional aprobado el 4 marzo de 2020.

Así lo plasmó este área integrada en la propia Presidencia del Gobierno en su ‘Informe anual de seguridad nacional de 2019’. Un documento que fue «elaborado por el Departamento de Seguridad Nacional del Gabinete de la Presidencia del Gobierno, en su condición de Secretaría Técnica y Órgano de Trabajo Permanente del Consejo de Seguridad Nacional, con la participación del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, el Ministerio de Justicia, el Ministerio de Defensa, el Ministerio de Hacienda, el Ministerio del Interior, el Ministerio de Fomento, el Ministerio de Educación y Formación Profesional, el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, el Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad, el Ministerio de Política Territorial y Función Pública, el Ministerio para la Transición Ecológica, el Ministerio de Cultura y Deporte, el Ministerio de Economía y Empresa, el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades y el Centro Nacional de Inteligencia», tal y como señala el propio documento.

Estudio relevante

La relevancia del estudio quedó aún más subrayada tras destacar el organismo que «en el análisis de Riesgos para la Seguridad Nacional 2019/2022 han participado ciento dieciséis expertos provenientes de la Administración, del sector privado y de los campos de la ciencia y la investigación. El informe fue aprobado por el Consejo de Seguridad Nacional en su reunión de 4 de marzo de 2020».

Es decir, antes incluso de la manifestación del 8-M y de los viajes a través de aeropuertos que en esas mismas fechas efectuaban clubes de fútbol y seguidores procedentes de países con los contagios ya disparados por aquellos días.

El organismo que lideró el informe, Seguridad Nacional, además es el mismo que alertó a Sánchez de forma reiterada antes del 8-M de la gravedad del coronavirus y del elevado riesgo de contagio social, tal y como ha publicado OKDIARIO en diversas exclusivas desde el 10 de mayo.

En este informe anual en concreto, en la página 185 del documento, se encuentra el apartado sobre ‘Seguridad frente a pandemias y epidemias’. Allí se narra el «objetivo»:

Respuesta ante riesgos sanitarios

«Adoptar planes de preparación y respuesta ante riesgos sanitarios, tanto genéricos como específicos». De nuevo se señala otra de las cuestiones que Sánchez ha permanecido meses sin querer llevar a cabo. Porque la estrategia de Seguridad Nacional parte del «principio de coordinación entre la Administración General de Estado y las Administraciones Autonómicas», además de con «organismos internacionales, como la Organización Mundial de la Salud, la Organización Mundial para la Sanidad Animal o, en el seno de la UE, el Centro Europeo de Control de Enfermedades».

Durante todo el verano, Sánchez se desprendió de su responsabilidad de coordinación autonómica y cuando lo ha hecho, ha sido en exclusiva con Madrid. El informe de Seguridad Nacional explica las «tendencias» observadas. Y allí destaca que «los cambios globales en las últimas décadas, con el incremento y envejecimiento de la población; el volumen creciente de viajes internacionales y la circulación transfronteriza de mercancías; los nuevos sistemas de producción y formas de consumo; los residuos generados y el cambio climático asociado marcan la creciente movilidad de riesgos para la salud pública y, en concreto, de microorganismos patógenos capaces de generar epidemias y pandemias».

El estudio añade, en ese momento, que «el desafío para detectar y reaccionar ante cualquier riesgo sanitario es particularmente sensible en infraestructuras y zonas especialmente críticas como son los puertos, los aeropuertos y las fronteras terrestres. Para ello, con la intención de mejorar las capacidades, se considera esencial desarrollar protocolos de colaboración entre las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE) y las autoridades sanitarias para hacer frente a situaciones de crisis o emergencias derivadas de riesgos de naturaleza biológica e incrementar la vigilancia sobre aquellas prácticas ilegales que pueden favorecer la propagación de epidemias, así como impulsar la coordinación con autoridades nacionales e internacionales encargadas del control de la calidad y seguridad alimentaria».

PCR y cuarentena

Sánchez, pese a todo ello, y a conocer esa alerta desde el 4 de marzo, se sigue negando a controles como la exigencia de PCR o la cuarentena, implantados hacia los españoles en países como Alemania (test y cuarentena -se puede eludir el aislamiento con test biológico molecular negativo-), Austria (que exige un certificado médico para los viajeros procedentes de España, a excepción de Islas Baleares y Canarias), Grecia, Italia, Malta, Turquía, Bélgica, Corea del Sur, Finlandia, Irlanda, Islandia, Letonia, Liechtenstein, Lituania, Noruega, Países Bajos, Reino Unido, República Checa, Rumanía o Suiza.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha reclamado esos test PCR en el control de Barajas desde el inicio. La última vez que los ha pedido oficialmente -e infructuosamente- ha sido, de hecho, en las recientes conversaciones mantenidas con Pedro Sánchez en las que el presidente nacional prometió colaboración.

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