Sánchez ve en Brasil una «amenaza mundial» de los «movimientos ultras» mientras gobierna con Bildu y ERC
Aprovecha su intervención ante diplomáticos españoles para apoyar a Lula da Silva
Cientos de partidarios de Bolsonaro asaltan el Congreso, el Supremo y el palacio presidencial en Brasil
Asalto al Congreso de Brasil, noticias en directo | Última hora de Lula da Silva y Bolsonario
Horas después del asalto al Parlamento del Brasil, ante más de un centenar de embajadores, Pedro Sánchez, ha alertado de las consecuencias que ciertos mensajes «ultras» pueden tener sobre «la convivencia». Sin acritud ni autocrítica, el líder socialista que ha dejado en manos de los separatistas de ERC y los proetarras de Bildu la gobernabilidad de España, ha afirmado que esos «movimientos repulsivos quieren arrollar con todo mediante la mentira envenenando la sociedad».
El presidente del Gobierno ha aprovechado la inauguración de la VII Conferencia de Embajadores para expresar el respaldo pleno de España al presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, ante el asalto del Congreso, el Supremo y el palacio presidencial por parte de supuestos seguidores del ex presidente del país y perdedor de las elecciones, Jair Bolsonaro.
Considera Sánchez que estos movimientos son la mayor amenaza a la democracia en todo el mundo. Ayer, vía redes sociales, ya mandó un mensaje de apoyo a da Silva, uno de sus principales aliados a día de hoy en América Latina y del que espera su participación en la cumbre Europa – CELAC que Sánchez organizará en otoño en Madrid.
En la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores, acompañado de José Manuel Albares, Sánchez ha manifestado que «los movimientos ultras están dispuestos a arrollar con todo». Entre este lunes y martes, el Gobierno pretende alinear el mensaje de los más de 120 diplomáticos que representan a nuestro país en el mundo, de cara a la presidencia de turno de la Unión Europea que ostentará España en el segundo semestre del año.
«Los métodos los conocemos y se repiten milimétricamente en todos y cada uno de los países que los sufren», ha subrayado el presidente del Gobierno. Primero, ha dicho, el uso sistemático de la mentira para captar seguidores. Luego el recurso al insulto y a la violencia verbal «para envenenar la convivencia en la sociedad y exaltar a sus seguidores» y, finalmente, un ataque a las instituciones y a la legalidad.
Todo eso, ha dicho, se vio en Estados Unidos y ahora en Brasil. El líder socialista ha expresado su preocupación por el hecho de que pueda reproducirse en otros países de nuestro entorno ya que «se comprueba a diario en diversas latitudes».
Por eso, y frente a ello, el jefe del Ejecutivo ha subrayado que la acción exterior de España debe sustentarse en los valores que recoge la Constitución, valores que ha recalcado que están en las antípodas de un fenómeno que ha calificado de repulsivo y que ha considerado que es la primera amenaza actual.